CORTÉS, HONDURAS. Cualquiera que transitara por la carretera que conduce de El Progreso a San Pedro Sula podía observar una pequeña «champa» con un letrero que decía La Hora del Café, un emprendimiento por el que Francisco Javier García Sullivan se hizo conocido.
El hondureño era originario de Tela, Atlántida, pero desde hace unos 20 años que residía en El Progreso, sitio donde poco a poco su nombre comenzó a ser escuchado.
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La Hora del Café un lugar como «en casa»
En una de sus últimas entrevistas, Sullivan señaló que el municipio necesitaba más negocios como el suyo para lograr levantarlo. «Es sano, se puede emprender», contó en aquel momento.
De acuerdo a su relato, decidió darle una solución a la necesidad y por eso inauguró el local «La Hora del Café» en el 2019 en San Manuel, Cortés. El comerciante inició tras la experiencia que adquirió cuando trabajaba embarcado.
Su más grande sueño era convertir su pequeño negocio en una franquicia nacional que brindara empleo a otros hondureños. En su local a orilla de la carretera, Sullivan tenía un espacio acogedor para su clientela, incluso tenía hasta hamacas para que pudieran descansar, algo que quería hacer desde antes de abrir su negocio.
En su menú contaba con 52 sabores de café 100 % hondureño y combinaciones con té. Era muy común que todo aquel que pasara por la zona se tomara el tiempo para tomar una sorbo y luego seguir el viaje.
Sullivan tenía el apoyo de los hondureños
«He sido una persona que me ha encantado emprender, no solo en esta rama. Lo que ha sucedido es que, en nuestro país, si usted hace algo, todos le quieren copiar, no son originales», dijo en su última entrevista Javier Sullivan.
Muchas personas apoyaban al hondureño, cada día llegaban a degustar de su café y manifestaban salir satisfechos. Sin embargo, el sueño de Javier Sullivan se apagó.
Él desapareció el pasado 26 de junio cuando estaba en su negocio y según las averiguaciones de las autoridades policiales, unos individuos llegaron y se lo llevaron en su propio vehículo doble cabina, de color blanco.
En el local, varios utensilios que utilizaba quedaron tirados en el suelo. Fue dos días después, que agentes reportaron el hallazgo del automóvil de Sullivan, el cual, estaba quemado en las cañeras de San Manuel, Cortés.
Encuentran su cadáver
Aunque encontraron una pista, todavía no tenían indicios del hondureño, pero albergaban las esperanzas de encontrarlo con vida. En todo momento, las personas estuvieron al pendiente, enviando mensajes de apoyo a la familia del emprendedor.
Pero toda ilusión se vino abajo, luego que las autoridades revelaron que recibieron una denuncia ayer, a eso de las 4:00 de la tarde para informarles que en las aguas del río Ulúa, a la altura del sector Campín, había un cuerpo sin vida, flotando.
Elementos del Cuerpo de Bomberos rescataron el cadáver e indicaron que al lugar llegó su hijo Christian García, quien identificó a su papá por la vestimenta y sus rasgos físicos.
La muerte de Javier Sullivan ha causado mucha indignación, no solo en aquellos que visitaron su negocio, sino en la mayoría de hondureños que sabían de su esfuerzo.
Lamentan la pérdida
Los comentarios no se hicieron esperar. «Su único delito era querer salir adelante«, «un hombre luchador», «extrañaré ir a tomar café, qué injusto», fueron algunas reacciones de compatriotas.
Algunos señalaron que la noticia era tan difícil de creer y que esperan se haga justicia con el caso del emprendedor. Las autoridades policiales, por su parte, manejan la investigación como un homicidio y dice tener pistas de los supuestos responsables.
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