Todo empezó hace alrededor de cinco meses con instantáneas tomadas con el celular. La calidad de las fotos era lo de menos, lo que importaba era el contenido, el concepto: dejar en evidencia cómo muchos hombres negros “usan” a las mujeres blancas como trofeos. El artista Nate Hill encontró una particular manera de manifestar esto: con “autofotos” (conocidas como “selfies”) con mujeres desnudas montadas sobre sus hombres, como si fueran una bufanda, una cosa.
El artista, de 36 años, originario de Florida (EEUU) y con experiencia en performances provocativas, pretende llamar la atención sobre las complejidades sociales que rodean a las relaciones interraciales en Estados Unidos. Tal como declaró a MailOnline, su intención es poner de relieve el hecho de que “hay hombres negros que piensan que estar con mujeres blancas es un símbolo de estatus”.
Es consciente de la polémica que esto trae consigo, ya que incluso quiere generarla para inspirar en su público un “auto examen” que los haga reflexionar sobre sus propios actos. El mismo es hijo de un padre negro y una madre blanca, por lo que estos temas, dice, los vivió “en casa”.
Sin embargo, esto no sólo representa una controversia a ese nivel, sino que también despertó grandes críticas desde la comunidad feminista: ¿qué sucedería si un hombre blanco “usara” a una mujer negra?, se preguntan.
Ya “usó” alrededor de 20 mujeres sobre sus hombros. La mayoría de las fotos fueron tomadas en las casas de las chicas o, por ejemplo, durante una performance en el Centro de Artes Abrons en el Lower East Side, donde se paró en una plataforma giratoria durante un par de horas.
Su costado artístico lo desempeña durante una breve porción del día, ya que el resto del tiempo se dedica a su trabajo en un centro de investigación del Upper East Side. Mientras tanto, se niega a contar qué opina su esposa sobre semejante exposición pública.
A pesar de las críticas, él le da la bienvenida a la controversia: es el verdadero corazón del proyecto. Es que para él, “una obra de arte tiene más que ver con la idea que con la ejecución o el talento”, dice al Daily Mail. Y eso lo sabe bien: en 2011 creó un sitio web donde ponía a la venta leche con las que habían hecho gárgaras mujeres previamente elegidas y seleccionadas (White Power Milk). Un hombre que, sin dudas, no le tiene miedo a la polémica.