TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En Honduras la situación de la economía no está bien, debido a la crisis de la COVID-19, además el paso de los huracanes Eta e Iota ha dejado zozobra en la población hondureña, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Antes de la pandemia se registró que casi 1.8 millones de hondureños sufrían de crisis alimenticias, pero posterior a los eventos antes mencionados la situación se agudizó a 3.3 millones de hondureños que sufren este mal, así lo indicó este sábado la oficina del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Pero al ritmo que se dirige la nación hondureña, las cifras no prometen predicciones positivas en relación a este mal que se atraviesa en Honduras.
Es por ello que la oficina del PMA en Tegucigalpa indicó que la inseguridad alimentaria que afecta a 3,3 millones (de los 9,5 millones de hondureños), podría «aumentar a 4,4 millones al cierre de 2021».
Los daños de los fenómenos naturales se sumaron a los causados por la covid-19, que se comenzó a expandir en marzo de 2020, con un saldo que hasta hoy superan los 10.000 muertos y roza los 400.000 contagios, según estadísticas oficiales.
Las tormentas en combinación con la pandemia también dejaron a miles de hondureños sin empleo, lo que agudizó la crisis económica.
Es por ello que el PMA busca soluciones en conjunción con el gobierno para poder recuperarse de los choques que ha sufrido Honduras. Además, se detalló que los que más salen perjudicados por dichos actos suscitados son los hondureños más pobres que carecen de recursos.
Emergencia alimenticia
«La seguridad alimentaria se vio afectada negativamente. Agravó una situación ya deteriorada para los hogares que enfrentaron pérdida de sus empleos y cosechas», expresó el PMA en Tegucigalpa.
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«Estos impactos crearon colectivamente una superposición de necesidades humanitarias para cientos de miles de personas. Afectó comunidades vulnerables de la Honduras rural como urbana. Ahora enfrentan la triste realidad de recuperarse del peor desastre natural en el país en más de 20 años», dijo el director del PMA en Honduras, Etienne Labande.
Es por ello que se comenzaron a buscar soluciones para apalear la crisis de alguna manera y detener este mal que azota al país, dieron a conocer.
«Más de 68.000 personas también fueron beneficiados a través de proyectos de desarrollo, que garanticen la seguridad alimentaria a mediano y largo plazo, con la ejecución de estrategias para la construcción de comunidades resilientes al cambio climático, con una inversión a la fecha de más de 22,2 millones de dólares», expresó Labande.
Es por ello que se lanzó un llamado de atención al gobierno para que pueda atender las exigencias propuestas por el PMA. En ese sentido, se espera que pueda haber una reversión si las instituciones pertinentes gubernamentales dan prioridad a la situación.
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