Honduras. Hasta que acecha la contaminación ambiental la ciudadanía se preocupa, pero muchas veces hay factores que ignoran y que se pueden prevenir, en ese desarrollo de ideas hemos dialogado con dos ingenieras ambientales sobre lo que sucede en el Lago de Yojoa y en San Pedro Sula.
Una mezcla de olor a quemado o a excremento se comenzó a denunciar la semana pasada en San Pedro Sula. Habitantes de al menos 11 colonias lo reportaron mientras que la Gerencia Ambiental dijo que iba a investigar, pero aún no ha presentado resultados.
Mientras el hedor se introduce a las viviendas y organismo de los sampedranos, las aguas del prominenente Lago de Yojoa presentan un desfavorable nacimiento de algas y una especie de masilla o sedimento café que pone en alerta a pobladores, pescadores y más hondureños, ya que aseguran es un contaminante.
Ante eso, tanto la empresa acuicultora Aquafina y el Ministerio Público hicieron recolección de muestras para saber de qué se trata. La compañía privada asegura que es un «bloom de algas» producto de la escorrentía de las lluvias, mientras que los fiscales aseguraron que la recolección será analizada por un especialista en La Ceiba.
En ese orden, la búsqueda de respuestas continúa, principalmente de parte de las autoridades municipales en la Capital Industrial y las MiAmbiente a nivel gubernamental. Pero no existen criterios profundos y absolutos sobre los temas, y para que la ciudadanía conozca, hasta el momento.
Sin embargo, dos profesionales de la ingeniería ambiental, catedráticas universitarias, han expuesto algunas opiniones sobre las temáticas.
Urge investigar el perjuicio que pueden causar fumigaciones
Mientras se construía este reportaje, un olor a fertilizante se introdujo en mi vivienda, inmediatamente la nariz ardió. Hace dos días, a eso de las 11:00 pm, otro olor a excremento de gallina o químicos también se sintió, y pude constatar lo que centenar de ciudadanos están reportando.
Por ende, se le consultó a la ingeniera Leticia Irías, sampedrana y catedrática de la Universidad Católica de Honduras UNICAH y la Universidad de San Pedro Sula (USAP).
¿El Lago de Yojoa se contamina o son repercusiones de lluvias’
Para la ingeniera Suazo son las autoridades competentes las que deben investigar y «uno no puede opinar ni culpar a nadie mientras no tengan los resultados de los monitoreos que hace la autoridad». Sin embargo, expone que la carga que aportan los ciudadanos es a veces mayor y causa daño. Ella considera que la compañías hacen monitoreo en las aguas.
Restaurantes no tiene un sistema de drenaje adecuado
Residuos de crianza sí han perjudicado
En su intervención para desarrollar este son compartidos también por la ingeniera ambiental Leticia Irías. No obstante, bajo su criterio el Lago de Yojoa sí ha tenido un impacto por el desarrollo acuícola.
«Los residuos de actividades como la crianza de peces en un cuerpo de agua, pueden ocasionar un impacto muy negativo al entorno. Esto lo sumamos a la contaminación por años que ha sufrido. Es la receta perfecta para el desastre».
«No se debe focalizar, y por desgracia, es un problema de años. ¿Se puede corregir? Claro, lo primero es identificar, luego detener y después delimitar las estrategias para limpieza»: se autopregunta y aconseja la especialista hondureña.
No obstante, ella está de acuerdo que la correntía a causa de las lluvias si viene a perjudicar en esta temporada. Concluye que lo que le sucede al único lago hondureño es «mezcla de todas las actividades».