TEGUCIGALPA. A juicio de la subdirectora del Instituto Hondureño de Turismo (IHT), Michelle Paredes, el traslado del Aeropuerto Internacional a Comayagua y el cierre de Toncontín, tendrá un impacto, pero este será mínimo.
La funcionaria, aseguró que serán mayores los beneficios para el sector turísticos del país, ya que se podrán abrir nuevos y más atractivos destinos de diversas partes del mundo.
Paredes, manifestó que “hay que ver esta acción como algo positivo, habrá crecimiento en el turismo, ya que vamos a tener un aeropuerto en el que vamos a poder recibir aviones de mayor tamaño, lo que significa que vamos a poder aperturar nuevas rutas, destinos y conexiones con aerolíneas internacionales inclusive desde Europa”.
Consideró que “el traslado del aeropuerto al Comayagua, tendrá un impacto, pero hay un trabajo en conjunto con el gobierno que sabrá mitigarse, todos los cambios son buenos, pues traen cosas productivas, en el caso del sector turismo nos ayuda en vamos a poder aperturar nuevos destinos y rutas”.
Aseguró que desde IHT, seguirán trabajando en Tegucigalpa, con las asociaciones de pequeños hoteles, donde si habrá un impacto, pero que este no será mayor, ya que continuarán recibiendo turistas, por lo que se va a tener que potenciar la zona, mejorar el casco histórico de la capital, vamos a realizar muchas estrategias para que el impacto no sea tan grande”.
Las protestas, campañas y amenazas de demanda contra el gobierno para evitar el cierre del aeropuerto de Toncontín en Tegucigalpa, capital de Honduras, no se hicieron esperar, tras la firma del contrato millonario que permitirá la construcción del Aeropuerto Internacional de Palmerola en Comayagua.
Los primeros en alzar su voz son un grupo de diputados encabezados por Waldina Paz de Kurwahn. “Pedimos públicamente una reunión con la finalidad de encontrar respuestas y no nos cancelen el aeropuerto de Toncontin”, indicó la parlamentaria.