REDACCIÓN. La Iglesia católica destituyó a tres sacerdotes salvadoreños tras ser encontrados culpables de abuso sexual de menores.
Así lo aseguró este domingo el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar. «Hemos concluido los procesos penales eclesiásticos en contra de los sacerdotes acusados».
Los tres sacerdotes destituidos por el Vaticano son Juan Francisco Gálvez. Antonio Molina y Jesús Delgado.
Los escándalos de abusos contra menores salieron a luz en noviembre de 2015. En ese tiempo, fue cuando el arzobispado de San Salvador cesó de todas sus funciones.
Primero a Delgado, quien en ese momento era vicario de la arquidiocesis. Pero fue acusado de haber violado a una mujer, ahora de 43 años.
Este abuso fue cuando ella tenía entre 9 y 17 años. Delgado fue uno de los mejores historiadores de la Iglesia.
También fue biógrafo del asesinado y ahora beato salvadoreño Óscar Arnulfo Romero.
Gálvez fue suspendido a finales de noviembre del año pasado como párroco. Sorprendido en el municipio de Rosario de Mora, 19 km al sur de San Salvador.
En donde fue denunciado por cinco casos de pedofilia. En tanto, Molina, fue suspendido en febrero como párroco de la iglesia Santa Cruz.
En la ciudad de Panchimalco, 17 km al sur de San Salvador. Luego de ser acusado de dos casos de abuso sexual.
La Iglesia católica destituye a tres sacerdotes
Tras ser hallados culpables, los tres sacerdotes fueron condenados por la Iglesia.
«A la pérdida total y definitiva de todas las facultades sacerdotales».
«Por consiguiente de ahora en adelante ellos no podrán ejercer ningún oficio». «Ni función sacerdotal». Sostuvo Escobar.
Las destituciones, ya habían sido comunicadas a las víctimas de los tres sacerdotes. Explicó el arzobispo.
«La iglesia no tiene tribunales que sancionen con cárcel». «La sanción más grave sin duda es ésta (la destitución) .
Y siempre de carácter moral, el quitar todas sus facultades a un sacerdote», añadió.
Escobar sostuvo que con estas destituciones se pone en práctica «la disposición del papa (Francisco), que tantas veces lo ha repetido, de cero tolerancia en estos casos».