Tegucigalpa. Debido al solsticio de verano hoy será el día con más horas de sol y la noche más corta, este evento solar marca el comienzo del verano y el final de la primavera para el hemisferio norte del planeta.
Para el hemisferio sur, es decir todas las latitudes bajo el ecuador celeste, señala el inicio del invierno.
Por la posición de Honduras en relación al ecuador la diferencia horaria entre la noche más corta y la más larga es únicamente de 45 minutos.
Lo anterior según información brindada a Diario Tiempo Digital por el experto en astronomía y astrofísica, Ricardo Pastrana.
Sin embargo, para los países que se encuentran en el extremo norte del hemisferio la diferencia es mayor.
La misma puede llegar a ser superior a las dos horas entre el día más corto y el más largo.
Debido a ello estos países desarrollan un horario de verano y uno de invierno.
“En contraste para los países cercanos de la zona tropical no es significante hacer cambio de horario”, expresó Pastrana.
Fenómeno astronómico
Alrededor de las cuatro de la mañana, hora de Honduras, el Sol alcanzó su máximo desplazamiento hacia el norte del planeta.
Al llegar a ese punto, se detiene durante este día por un periodo de tiempo prolongado.
Es por lo anterior que nombra a este evento solar solsticio, ya que dicha palabra proviene del latín “Solstitium”, que significa “Sol quieto”.
Posteriormente el Sol emprende su desplazamiento hacia el sur del planeta alcanzando el punto máximo el 21 de diciembre, dando lugar al inicio del invierno.
Durante el solsticio de verano, el hemisferio norte recibe la mayor cantidad de radiación solar.
Lea también: En Honduras solo se podrá observar un eclipse lunar en este año
Antecedentes históricos
“Todas las civilizaciones, independientemente del lugar del mundo donde se desarrollaron observaron el cielo”, afirmó Ricardo Pastrana.
Pastrana es encargado de eventos especiales de la Facultad de Ciencias Espaciales en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.
Añadió que para estas culturas los fenómenos astronómicos servían para medir su tiempo.
Además indicaban los procesos para la agricultura y anunciaban los eventos religiosos a celebrar.
Entre algunos de los monumentos construidos destacan el de Stonehenge en Inglaterra, Carnac en Egipto y Chanquillo en Perú.
Estos monumentos demuestran que durante más de 5,000 años las personas han tomado nota de los recorridos del Sol.
