TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Más de 42 mil personas se aplicaron la dosis de refuerzo contra la COVID-19 en una jornada que se puede considerar como un éxito a nivel nacional, informó ayer, viernes, el viceministro de Salud, Fredy Guillén.
El funcionario precisó que la cifra abarca personal de salud, adultos mayores y personas con enfermedades de base, entre otros grupos priorizados que recibieron el refuerzo entre 25 y 28 de octubre.
La aplicación de la tercera dosis de refuerzo de la vacuna anticovid a los grupos antes mencionados se inició esta semana. «Entre el 25 al 28 (de octubre) se logró vacunar a 42 mil 193 personas con terceras dosis de Pfizer«, detalló Guillén sobre el tema.
Según las previsiones de la Secretaría de Salud, la población priorizada para vacunar, entre trabajadores de salud públicos y no públicos, adultos mayores y personas inmunocomprometidas es de 97 mil 351 personas.
En ese sentido, Guillén subrayó que la aplicación de la dosis de refuerzo «es un esquema en el que tuvimos un importante arranque, durante la presente semana, pero seguiremos con el proceso en las próximas semanas».
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Vacunas de refuerzo en Honduras
Respecto a las jornadas de vacunación que hasta el momento desarrolla Salud, el funcionario destacó que Honduras prosigue su trabajo de vacunación comunitaria, y en buena forma, lo que permite incrementar la cifra a más de 6,9 millones de dosis aplicadas en todo el país.
«Son más de 4.1 millones de personas las que han recibido al menos una dosis y más de 2.7 millones de hondureños los que tienen el esquema completo o las dos dosis», puntualizó el personero de Salud.
Para finalizar, Guillén dijo que el esquema general de vacunación proseguirá su curso normal en las próximas semanas. «El objetivo es inmunizar por lo menos al 70 % de la población médicamente apta», concluyó.
Vacunación obligatoria, sugiere viceministro de Salud
Debido a la posibilidad de un repunte de contagios por COVID-19, el viceministro de Salud, Roberto Cosenza, reconoció que la aplicación de la vacuna debería ser obligatoria.
Según Cosenza, es necesario que la vacuna sea obligatoria, ya que en Honduras existe un gran grupo de personas que no se quiere inocular contra la enfermedad respiratoria.
Esas personas que no quieren recibir el fármaco no solo ponen en riesgo sus vidas, sino que también la vida de sus familiares y amigos, manifestó el funcionario público.
Además, el médico dijo que quienes se niegan a vacunarse no valoran el trabajo que los profesionales de Salud hacen para proteger y atender a todos los enfermos del COVID-19.
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