TEGICIGALPA, HONDURAS. El canciller Lisandro Rosales sugirió al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que debe pensar en el desarrollo de los pueblos y “no jugar con estas cosas», en referencia a que se defina la frontera marítima en el Golfo de Fonseca.
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, y el de Nicaragua, Daniel Ortega, firmaron ayer en Managua el Tratado Integracionista del Bicentenario, que tiene como objetivo trazar una ruta de paz y prosperidad para ambos pueblos en el Golfo de Fonseca y mediante el cual los dos países delimitan sus fronteras en el mar Caribe y el Océano Pacífico.
Nicaragua reconoció, tras 29 años, que su frontera marítima en el Golfo de Fonseca es con Honduras, ratificando de esta forma el fallo dictado en 1992 por la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Inmediatamente después, Bukele escribió en sus redes: “Si yo hubiera firmado un idéntico tratado geográfico con Ortega, ¿qué estuvieran diciendo los demócratas de la Casa Blanca?”.
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Invitación a El Salvador
En ese sentido, Rosales invitó al mandatario salvadoreño «a que nos sentemos a la mesa a definir la frontera marítima con El Salvador».
«Los criterios de él los respeto, pues es un presidente, pero debe pensar en el desarrollo de los pueblos y no estar jugando con estas cosas”, reiteró.
Rosales describió al «acuerdo como histórico porque es una definición que tenía 30 años de estar postergada, por lo que llegó el momento de llevar la paz y seguridad al Golfo de Fonseca«.
Del mismo modo, aseguró que «el Tratado con Nicaragua es un acuerdo de país. Quien lo vea de otra manera es un mal hondureño. Hay que evitar suspicacias y la politiquería barata en estos temas. Debemos pensar en el desarrollo del Golfo de Fonseca de manera sostenible», señaló.
Con el nuevo tratado entre Honduras y Nicaragua, los pescadores hondureños podrán faenar en 200 millas náuticas en el Pacífico.
Honduras y la soberanía en Golfo de Fonseca e isla Conejo
El pasado 13 de octubre del presente año, Juan Orlando Hernández anunció la aprobación de un decreto ejecutivo que consiste en la ratificación de la soberanía del país sobre el Golfo de Fonseca.
En rueda de prensa, el gobernante dijo que fue necesario someterse a un juicio para aclarar tal situación.
“Fuimos dos países, El Salvador y Honduras, a la Corte a pedir que se expresaran para completar el gran sistema logístico que se anunció hace más de 10 años que Honduras necesitaba. Sin embargo, también al servicio de Centroamérica y las américas, se declaró como proyecto de prioridad nacional el puerto de Amapala que conecta con tierra firme”, expresó el mandatario en esa ocasión.
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