TEGUCIGALPA, HONDURAS. La angustia y la desesperación se han apoderado de varias familias hondureñas en los últimos años, las cuales han sufrido la desaparición de un ser querido, quien, en muchos casos, no ha dejado ni un rastro de su paradero.
Historias mediáticas y llenas de dudas como las del menor Enoc Chinchilla, o las más recientes de Angie Peña y Belkis Molina, han creado un clima de incertidumbre.
Ante estas y muchas otras desapariciones, surge la interrogante sobre cuál puede ser la causa y, de hecho, hay indicios que podrían apuntar a que existen grupos criminales o redes de tráfico de personas detrás del extravío de estas hondureñas y hondureños.
Por lo tanto, Diario Tiempo consultó a las autoridades correspondientes, quienes detallaron cuál es el proceder en este tipo de situaciones.
Además, se contactó con defensores de derechos humanos, quienes ayudaron a que esa problemática sea comprendida de mejor manera.
Como antesala a los expertos, vale explicar que, según la Interpol, la trata de personas es una forma de delincuencia organizada internacional, que constituye una forma de esclavitud en nuestros tiempos.
A su vez, el tráfico de personas se encuentra estrechamente vinculado a la trata de personas, pues muchos migrantes pueden ser víctimas de trabajos forzosos a lo largo del viaje.
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Seguridad al tanto de redes de tráfico de personas
Ante la posibilidad de que grupos criminales o redes de trata o tráfico de personas estén detrás de las desapariciones de hondureños, Diario Tiempo consultó con la doctora Semma Julissa Villanueva, viceministra de la Secretaría de Seguridad.
«Efectivamente, sí existen redes de tráfico de personas, incluidas en las zonas turísticas de Islas de la Bahía, Trujillo y Gracias a Dios; oriente del país y zonas fronterizas», aseguró la funcionaria.
Además, habló sobre «factores que influyen: la impunidad, la desigualdad social, discriminación, falta de oportunidades, pobreza y el no creer que el problema existe«.
En ese sentido, la viceministra Villanueva fue contundente a la hora de manifestar que se luchará contra estas redes.
«Verá los golpes que se vienen contra esas estructuras criminales transnacionales. Nosotros no seremos cómplices de ninguna de esas redes, que siempre han existido y que los dejaron operar a su antojo», expresó.
Estas redes podrían aprovechar la crisis migratoria
Hugo Maldonado, presidente del Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (CODEH), también dio su punto de vista a Diario Tiempo sobre los hondureños desaparecidos.
«Nosotros sí creemos que haya un crimen organizado asolapado al interior del país», manifestó Maldonado.
En ese sentido, detalló que considera que muchas desapariciones tienen que ver con el tema migratorio.
«Eso está como aquellos coyotes que forman parte de ese mismo crimen organizado y que de una u otra forma, trasladan a las personas de un lugar a otro con aquella falsa esperanza de llevarles a los Estados Unidos (EE.UU.)«, dijo.
«Que no les va costar nada y que de una u otra forma ponen en riesgo la vida, su seguridad personal», continuó el titular del CODEH.
Las caravanas de migrantes son el lugar ideal
Aunado a esto, Hugo Maldonado reiteró que la trata y el tráfico de personas se beneficia del constante flujo migrante.
«Aquí hay un desaparecimiento de jóvenes, por ejemplo, menores de 18 años», ejemplificó.
Según explicó Maldonado, las caravanas migratorias son aprovechadas por estos grupos delictivos, ya que son situaciones que les permiten identificar a posibles víctimas.
«Es una situación difícil, en una caravana la Policía no puede identificar a los coyotes que van a lo interno de las mismas», expresó.
«A nivel de país esto existe, tenemos el caso de Angie, de Belkis, el caso de Enoc, el de los cuatro miembros del pueblo garífuna de Triunfo de La Cruz», lamentó Maldonado.
«La Policía debe ser más diligente. Cada posta policial debe ser un ente de auxilio inmediato para las personas desaparecidas y máxime aquellas que sus familiares tienen indicios de donde se encuentran», exhortó.
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Hondureños identificados pero sin rescatar
Aunado a lo anterior, Itsmania Platero, defensora de derechos humanos, dedicada al tema migratorio, lamentó que existan casos en los que se identifican a hondureños privados de su libertad y que no se hace nada para rescatarlos.
Por ejemplo, contó sobre el caso de un menor que era buscado desde el 17 de julio y que, pese a que las autoridades lo habían dado por muerto, agentes de la patrulla de migración de Texas lo rescataron.
Y solo se supo sobre el infante por una fotografía publicada por la entidad internacional de migración. Aunque de momento el menor sigue en suelo extranjero, a la espera de que desde Cancillería se hagan las diligencias para su retorno al país.
«Te puede servir este caso como el ejemplo de cuantas personas desaparecen, en particular cuantos niños están desapareciendo en los puntos de frontera en el recorrido», dijo Platero.
«Hay grupos extremistas, racistas. Las leyes son ásperas y violatorias a los derechos humanos», contextualizó.
Migrantes retenidos en puntos fronterizos
Además, Platero contó sobre las condiciones en las que muchas veces los hondureños viven en su intento por cumplir el sueño americano.
«Yo tuve el informe de que hay personas en Zacatecas y en Ciudad Juárez, que en los albergues del Hogar Romero, en el Albergue de Zacatecas, donde hay un hacinamiento, donde han pequeñas celdas, módulos pequeñitos», relató la defensora de derechos.
«Una población de más de 50 personas. Tienen a los migrantes como encarcelados, están siendo utilizados los migrantes por el gobierno de México y EE.UU.», aseguró.
«Mientras más niños tengan encarcelados, mientras mas mujeres tienen encarceladas, ellos generan más dinero de ayudas internacionales», señaló Platero.
Al respecto, aseguró que, en efecto, existen grupos criminales que están al acecho de los migrantes que intentan llegar a EE.UU.
«Cuando se habla solo de un traficante, no trabajan solos, ellos son una red. Y lo pudimos experimentar en el cruce de México a Estados Unidos», puntualizó.
En ese sentido, Itsmania Platero hizo un llamado a la Secretaría de Seguridad, ya que existen personas reportadas como desaparecidas que han sido identificadas y localizadas, retenidas en algunos puntos fronterizos.
No obstante, no se puede hacer nada para rescatarlas y retornarlas al país, ya que no se cuenta con el máximo interés de las autoridades.
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Sobre las desapariciones en los últimos meses
Diario TIEMPO también contactó al subcomisario Cristian Nolasco, portavoz de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), quien brindó los datos de las desapariciones denunciadas de enero a julio del año 2022.
«En los últimos meses, casi siete meses ya, hemos tenido, a nivel de DPI, en las denuncias, 224 desparecidos. De esos, ya hemos encontrado a más de 160», comenzó Nolasco.
«Está un grupo pendiente de encontrarse, entre ese grupo que está pendiente hay 5 que se llaman muertes presuntas. Significa que han entrado a morgues y que está pendiente que den respuesta a una prueba de ADN», detalló.
«Además de esos, uno pasó a fiscalía porque estaba fingiendo su propio delito», contó el subcomisario.
En ese sentido, el portavoz de la DPI explicó las diferentes categorías con las que se trabajan las desapariciones.
Un resumen de esas 224, hemos logrado detectar, según las investigaciones que ha hecho la DPI, que 17 son por problemas mentales, mencionó.
Treinta son por razones sentimentales. Es cuando una persona se enamoró y se va, ya sea mayor o menor. Se van porque a veces hay maltrato familiar, continuó.
«Tenemos 7 que son por migración, que hemos contactado que están en EE.UU. Decidieron irse, nos contactamos, cruzaron los puntos ciegos y ya están en EE.UU; tienen notificación amarilla», agregó Nolasco.
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Hay personas que «deciden desaparecer»
Según explicó el portavoz de la DPI, se han registrado casos en los que las personas son reportadas como desparecidas porque ellas mismas así lo deciden.
«180 se pierden voluntarios, que ellos deciden, apagan teléfono, cambian el número, buscan la manera de que nadie tiene que saber de él. Entre estos voluntarios está metida otra parte que son los infieles, se van de casa, pierden la comunicación con la esposa y ella pone la denuncia por desaparecido», dijo Nolasco.
También, detalló que entre los desaparecidos hay 89 del sexo masculino y 52 del femenino. Dos menores, un niño de 2 años y otro de 6 años.
Asimismo, de los hombres desaparecidos, 83 son mayores de edad y 6, menores. De las mujeres desaparecidas, 32 son mayores de edad y 20, menores. Además, de esas féminas menores, entre 11 a 17 años
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