TEGUCIGALPA, HONDURAS. La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) dio a conocer las primeras hipótesis que manejan sobre el crimen contra Melissa Núñez, una mujer transgénero que murió acribillada el martes 18 de octubre en la colonia José Tomás Moncada, Morocelí, El Paraíso.
La mujer trans falleció acribillada por sujetos encapuchados que le dispararon desde una motocicleta.
De acuerdo con lo revelado por el portavoz de la DPI, el subcomisario Cristian Nolasco, hasta el momento mantienen dos posibles causas del crimen. La primera, por razones pasionales, y la segunda, por la venta y distribución de droga.
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«Se sigue con la investigación, esas son hipótesis, ese es el trabajo de la DPI tratar de confirmarlas e investigar cuál fue el móvil», explicó Nolasco.
Asimismo, el funcionario reiteró el compromiso de la institución investigativa en hacer justicia ante los crímenes contra los hondureños.
«Lo que sí podemos decir que esta muerte de Melissa no quedará en impunidad. Vamos a trabajar para esclarecer la verdad y demostrar las capacidades de la DPI», afirmó.
Regresaba de casa de su madre
De igual manera, el portavoz informó que Melissa iba hacia su casa de habitación, después de visitar a su madre, cuando los sujetos la acribillaron.
Según comentó, la integrante de la comunidad LGBTIQ+ acostumbraba a viajar a los Estados Unidos, país donde se sometió a las cirugías para cambiar de género.
«Tenía dos meses de haber venido de EE.UU. de vacacionar donde su familia y cuando la mataron viajaba de la casa de su madre hacia su lugar de residencia», detalló Nolasco.
Piden justicia
Organizaciones defensoras de los derechos humanos en Honduras señalaron que el asesinato de Melissa Núñez es otra señal de lo peligrosa que es la vida en el país para los miembros de la comunidad LGTBQ+.
“Estamos preocupadas que en Honduras siga creciendo la violencia”, dijo a The Associated Press Merlin Eguigure, coordinadora del Movimiento de Mujeres por la Paz Visitación Padilla. “El gobierno debería declarar emergencia frente a este tema”, agregó.
Danny Reyes, representante del Movimiento Arcoíris de la comunidad, comentó: “nos siguen asesinando, nos siguen violentando nuestros derechos”.
Glenda de Jesús Núñez, hermana de Melissa, la recordó como una activista que defendía los derechos de los miembros de la comunidad LGTBQ en Estados Unidos. “Nosotros platicábamos cosas familiares, era muy reservada sobre los temas de su comunidad. Nosotros la aceptábamos y amábamos como ella era”, compartió.
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