TEGUCIGALPA, HONDURAS. El medio de comunicación israelí Haaretz, publicó un artículo de opinión ayer primero de mayo, que titularon como «Honduras y la embajada de Jerusalén: cómo Netanyahu respaldó los acuerdos de armas y cocaína», donde se habla de la cercana relación del expresidente Juan Orlando Hernández, con Israel.
Asimismo, la publicación da inicio con una cronología desde que llegó el avión de la Administración de Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) para llevarse a Hernández.
«Alrededor de las 2:30 p.m. del jueves 21 de abril, un avión perteneciente a la DEA, despegó de la capital hondureña de Tegucigalpa, llevando al expresidente Juan Orlando Hernández para enfrentar un juicio en Manhattan por cargos de narcotráfico y armas de fuego»
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Por otro lado, mencionan los delitos por los que acusan al extraditado hacia los Estados Unidos.
«Hernández está acusado de haber utilizado dinero del tráfico de drogas para financiar su campaña política y, después de ser elegido, presuntamente explotar el dinero del Gobierno hondureño, junto con la aplicación de la ley y los recursos militares, para avanzar en sus planes de tráfico de drogas».
Según el artículo de Haaretz, si no fuera por su relación con Israel, la carrera política de Hernández habría terminado hace años.
«Si no fuera por los estrechos vínculos de Hernández con Netanyahu, y la negociación en la que Israel participó en torno al traslado de la Embajada de Honduras a Jerusalén, la carrera política de Hernández probablemente habría terminado hace algunos años».
También, recalcan una supuesta participación indirecta de Israel con el expresidente Hernández.
Juan Orlando Hernández , «amigo activo de Israel»
«A finales de 2014, Netanyahu y los ministerios de Relaciones Exteriores y Defensa habían identificado al corrupto Hernández como el eslabón más débil y maleable entre los líderes latinoamericanos y, por lo tanto, el primero en aceptar trasladar la embajada de su país a Jerusalén a cambio de varios beneficios personales».
Fragmento de la nota redactada por el medio israelí
En una declaración oficial a los medios de comunicación coincidiendo con la visita, Israel elogió los lazos de seguridad con Honduras y promocionó los valores compartidos de los dos países basados en la democracia, los derechos humanos, el respeto por el Estado de derecho, la pasión por el desarrollo y el crecimiento, y las aspiraciones de paz.
Tras la visita de Hernández a Israel, los dos países firmaron un memorando de entendimiento de seguridad (febrero de 2016) y un importante acuerdo de seguridad (diciembre de 2016), bajo el entonces ministro de Defensa, Avigdor Lieberman.
Entre las firmas de estos dos acuerdos, la activista ambiental y de derechos de los nativos Berta Cáceres fue asesinada por las fuerzas de seguridad en Honduras el 2 de marzo. Más tarde ese mes, 60 miembros del Congreso escribieron nuevamente al secretario de Estado, Kerry, exigiendo la suspensión inmediata de toda la ayuda de seguridad de los Estados Unidos a Honduras.
A cambio del apoyo de Hernández a Israel en foros internacionales, los gobiernos de Netanyahu armaron a las fuerzas de seguridad corruptas y violentas del presidente y ayudaron a su reelección en noviembre de 2017.
En el año anterior a las elecciones, Hernández emitió repetidamente declaraciones al público describiendo la ayuda militar israelí como «un gran salto» para las fuerzas de seguridad de su país, afirmando que Honduras nunca antes había recibido una ayuda militar tan extensa y que el acuerdo histórico fortalecería a las fuerzas de seguridad hondureñas y les daría forma durante los próximos 20 años.
Aunque Israel suele sostener que no se involucra en los asuntos internos de otros países, un mes antes de las elecciones hondureñas, en octubre de 2017, la embajadora israelí en Honduras, Matanya Cohen, se reunió con el ministro de Defensa hondureño.
Si bien los detalles del acuerdo de seguridad se clasificaron en Israel, el gobierno de Netanyahu no pronunció una palabra de protesta sobre Hernández, declarando para fines de campaña que implicaba una actualización de los aviones y helicópteros.
Mencionan a Hernández como una persona «corrupta»
Si bien la acusación y los procedimientos legales en los Estados Unidos han agregado algunos detalles picantes, se sabe desde hace muchos años que Hernández es corrupto con vínculos con organizaciones criminales y traficantes de drogas, y que las fuerzas de seguridad que construyó supuestamente para combatir el crimen eran en esencia una organización criminal.
Un fuerte recordatorio de esto es proporcionado por las olas masivas de hondureños que huyen de la violencia en su tierra natal y llegan a la frontera entre Estados Unidos y México. Solo en 2021, 309,000 hondureños, equivalentes a un poco más que la población total de Haifa, intentaron ingresar a los Estados Unidos a través de su frontera sur.
A pesar de todo esto, nada llevó a los gobiernos de Netanyahu o a los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y Defensa a detener la carrera para trasladar la Embajada de Honduras a Jerusalén. Tampoco, lo impidió la avalancha de refugiados que huyen de Honduras ni los debates en el Congreso de Estados Unidos sobre la corrupción y la violencia del régimen de Hernández.
A lo mencionado se agrega la acusación de Estados Unidos presentada contra el hermano de Hernández en 2019 por narcotráfico y los testimonios que se escuchaban en un tribunal de Manhattan sobre la participación del presidente hondureño en sus acciones.
Es curioso que a pesar de que Chen generalmente responde a los llamados para detener las exportaciones de seguridad, afirmando que fue una decisión del Ministerio de Defensa coordinada con el Ministerio de Relaciones Exteriores, esta vez se esforzó por enfatizar que fue una decisión del Gobierno israelí. ¿Es esto un intento implícito de dar crédito a Netanyahu, o una alusión a consideraciones políticas que estuvieron involucradas en el asunto?
El apoyo político y militar a Hernández no ha cesado hasta ahora que ha sido extraditado a Estados Unidos. De repente, desde el lado israelí solo hay un silencio incómodo.
El Ministerio de Defensa no emitió un comunicado diciendo lo orgulloso que está de haber ayudado a salvaguardar los envíos de drogas. Netanyahu no se atribuyó el mérito de empujar cocaína por las narices de los gringos, ni compartió nada del crédito con Sara, para el caso.
Información publicada por el medio de comunicación israelí Haaretz.
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