AFP. La guerra pesa en el ánimo de Ilse Thiele, sentada en una butaca de motivos florales en su salón berlinés, con la televisión emitiendo constantemente las noticias de Ucrania.
«Todos los recuerdos vuelven», admite esta jubilada de 85 años, antigua directora de una oficina de correos en Alemania del Este, ante las imágenes de los refugiados asistidos por voluntarios en la estación central de Berlín.
«Siento tanta pena por toda esta gente, sobre todo por los niños», continúa.
Huyendo a pie
Ilse Thiele recuerda el frío punzante y el hambre que sintió en su propio periplo por la Baja Silesia, en la actual Polonia, en el invierno de 1944-45. Con su madre, huyeron a pie del avance soviético para llegar a Turingia, un estado en el centro de Alemania.
La Segunda Guerra Mundial está todavía muy presente en la memoria de los alemanes y en sus discursos. Incluso, influye en la percepción de la invasión de Ucrania y en el debate político sobre cómo responder a ella.
Expertos en nazismo
Los alemanes se sintieron especialmente asqueados por la invocación de Vladímir Putin de una supuesta lucha contra agresores «neonazis» ucranianos que fomentaban un «genocidio».
GALERÍA
Le puede interesar: FMI advierte: Guerra en Ucrania frena crecimiento económico
Comparación con Nazis
En las últimas semanas, el presidente ruso no dudó en comparar a los soldados ucranianos con los combatientes locales que participaron activamente en las exacciones nazis en la antigua URSS.
La embajada de Rusia en Sudáfrica tuiteó que Moscú, «como hace 80 años, combate el nazismo en Ucrania«.
Opiniones de expertos
La misión alemana replicó airadamente: «Vergüenza a los que caen en la trampa. (Desgraciadamente, somos una especie de expertos en nazismo)».
Putin pervierte el «apabullante consenso internacional» respecto a que los nazis eran «la encarnación del mal», dice Hedwig Richter, una profesora de historia contemporánea en la universidad de Budeswehr en Múnich.
Absolutamente absurdo
«Es absolutamente absurdo», sobre todo si consideramos que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski es judío, añadió.
La experta se dice convencida de «la importancia de la memoria histórica, sobre todo cuando vemos cómo Rusia, olvidando los crímenes estalinistas, nutre un nacionalismo agresivo».
GALERÍA
Fracasos históricos
Otro historiador, Heinrich August Winkler, estableció en el semanario Die Zeit puntos en común entre el Führer nazi y el dirigente ruso. En particular, la obsesión de Putin de «una puñalada por la espalda» de Occidente, una retórica desplegada en los años 20 por Hitler tras el fin de la Primera Guerra Mundial.
«Putin enfrenta hoy a las democracias occidentales a la cuestión de saber si ellas se toman en serio los valores a los que aspiran», según Winkler, ve un paralelismo con la actitud de los Aliados durante los años 1930 que querían esquivar a todo precio una confrontación armada con Alemania.
Viejas heridas
Para Ilse Thiele, la jubilada berlinesa, la capacidad de sacar lecciones del pasado reabre viejas heridas.
«Mis padres vivieron dos guerras mundiales y yo viví una a causa de este cerdo de Hitler», explica, recordando también la familia comunista de su marido fallecido, encarcelada en el campo de concentración nazi de Sachsenhausen.
«¿Quieren iniciar una tercera guerra mundial? No puedo entender cómo, cuando se sabe un poco de la guerra, se puede empezar una nueva…», dice.
Nota para nuestros lectores:
Suscríbete gratis a más información en nuestro WhatsApp. Haga clic en el enlace: https://bit.ly/2Z2UF3j.