Tegucigalpa, Honduras.- Dos hondureños que, siendo compañeros en las aulas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) soñaron con algún día asociarse para fundar una empresa, han logrado, 20 años después, concretar aquel anhelo.
Se trata de Eddy Martínez y Hermes Oseguera, quienes ahora –con más madurez personal y profesional que aquella de los tiempos de universidad– han decidido apostarle a su propio proyecto empresarial.
Martínez y Oseguera son graduados de una licenciatura en Contaduría Pública en la UNAH y tienen un máster de la Universidad Tecnológica Centroamericana (UNITEC).
Hace unos días inauguraron PEMESA, cuya actividad principal es la comercialización de básculas, soluciones de pesaje y equipo de medición para hospitales y laboratorios.
Un sueño de hace 20 años
«Es una idea que la teníamos pensada hace mucho tiempo», responde Martínez, quien trabajó sus primeros años en la banca y el comercio en Honduras. Luego, el empresario viajó al extranjero para dirigir una empresa transnacional.
Martínez afirma que él es un patriota. «Independientemente de lo que yo haya progresado y aprendido en el extranjero, siempre he visualizado que mi negocio tenía que desarrollarlo en Honduras», expone.
Puestos sus pies de nuevo en Honduras, Martínez ha vuelto a encontrarse con quien fuera su gran amigo en las aulas universitarias y fuera de ellas. De hecho, nunca se distanciaron, explica.
«Es un socio que no solo es mi amigo, sino mi hermano y una persona en la que puedo confiar en invertir aún en circunstancias tan adversas», apunta.
Una oportunidad, dos décadas después
La existencia de este sueño de antaño lo refrenda su socio, quien durante 15 años trabajó en la banca local, la mitad de ese tiempo como oficial de negocios. Después, ha fungido como gerente de dos empresas, cargos en los que adquirió otras habilidades.
«El proyecto estaba en la cabeza de nosotros desde que estábamos en la Universidad, siempre soñamos que un día montaríamos una empresa y veinte años después se nos dio la oportunidad», agrega Oseguera.
Oseguera explica, además, que hace dos décadas sabían que debían asociarse, pero no tenían claro el rubro en el que deseaban invertir. Fue hasta hace cinco años cuando pensaron que el negocio estaba en la comercialización de básculas y equipos de medición para hospitales.
Tomaron la decisión de hacerlo en abril pasado, en mayo se pusieron manos a la obra y arrancaron en la primera semana de este mes de noviembre, detalla.
Juntaron talentos para el éxito
De socios lo que han hecho es juntar talentos. Ambos son profesionales con experiencia administrativa y en los negocios, aunque cada uno tiene lo suyo.
Oseguera indica que Martínez es detallista, ordenado y un financiero genial, mientras que él es un vendedor nato, un profesional muy práctico y un buen administrador.
Martínez asegura que su socio trabaja más el día a día en el negocio y conoce los detalles y las trincheras desde la que se puede importar, así como los procesos arancelarios.
Ambos refieren que han dedicado en ese proyecto todos sus esfuerzos, aún cuando las condiciones de país y del mundo pueden parecer adversas.
Optimismo y cautela al invertir
La inversión que han hecho, explican, ha sido con optimismo, pero a la vez con cautela ante los anuncios sobre el futuro de organismos especializados.
«Pero estamos conscientes de que la economía y los mercados no se detienen», explica Martínez tras señalar que las estrategias cambian y que ellos tienen todo el bagaje para sortear esas vicisitudes.
Martínez y Oseguera piensan expandirse en mercados centroamericanos, pero por ahora le apuestan a Honduras, conscientes de que tendrán que lidiar con ciertos factores.
Oseguera dice que hubo obstáculos para iniciar su proyecto, identificando algunos de los más comunes, como la tramitología para obtener permisos estatales.
Nada es expedito acá, opina Oseguera, quien refiere que a pesar de ello piensan que hay oportunidades, siempre que haya conocimiento sobre cómo hacer las cosas.
Consejo a los emprendedores
A quienes quieren emprender, estos empresarios aconsejan que no tengan miedo e cumplir sus sueños y lo intenten, sobre todo si tienen el capital. Un buen socio, buen persona, leal y ordenado, no está demás, resaltan.
No obstante, señalan que es oportuno considerar tomar decisiones en función de los conocimientos previos. Es decir, ellos se refieren a invertir, especialmente en aquello en que tengan cierta experiencia, pues ahí está la posibilidad del éxito.