Honduras. La Fiscalía de los Estados Unidos tiene listas cuatro llamadas de Alexander Mendoza, alias Porky, líder de la Mara Salvatrucha (MS-13) en Honduras, para presentarlas como pruebas contra el exmandatario hondureño Juan Orlando Hernández (JOH) en su juicio por narcotráfico.
El juez Kevin Castel admitió los audios para que el jurado, elegido ayer en el primer día del juicio, pueda escucharlos como parte de las evidencias que confirmarían el involucramiento de Hernández con «bandas del narcotráfico».
En la carta, dirigida hacia el juez Castel, se indica que se ofrecerán los extractos de cuatro llamadas de audio que fueron interceptadas por las autoridades hondureñas alrededor de 2015, en relación con una investigación hondureña sobre la MS-13. Además, se presentarán hojas de líneas asociadas, que reflejan fecha y hora de cada llamada.
El documento explica que los borradores de las hojas de líneas para las cuatro
llamadas de audio de Mendoza se presentaron por primera vez a Juan Orlando en agosto de 2022. Mientras que las cuatro llamadas se las presentaron «preoficialmente» el 7 de diciembre de 2023.
La Fiscalía argumenta que estas llamadas son significativas para evidenciar la conexión que Hernández tuvo durante años con bandas del narcotráfico. La prueba gubernamental «415 también es relevante porque describe las fechas y horas de las llamadas telefónicas interceptadas realizadas en apoyo de la conspiración acusada», señalan.
Se trata de llamadas telefónicas entre Mendoza y otros miembros y asociados de la MS-13. Esos audios sirvieron para arrestar y condenar a «El Porky», actualmente prófugo de la justicia por sus actos ilícitos en suelo hondureño.
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¿Qué dicen las llamadas?
Primera y segunda llama
La primera llamada, identificada como GX 403, se realizó el 5 de junio de 2015, entre Mendoza y una mujer no identificada (“CC-1”). Durante la llamada, se discutió que la presidencia del acusado no iba a durar mucho más porque se había mantenido una conversación telefónica con Juan Carlos «El Tigre» Bonilla, en la cual se explicó que Hernández había recibido millones de dólares de parte de Héctor Emilio Fernández Rosa, alias “Don H”, y el cartel de los Valle Valle.
La segunda llamada, identificada como GX 404, se llevó a cabo el 19 de junio de 2015. Mendoza habló con otro líder de la MS-13, David Elías Campbell, sobre las intenciones de Hernández de asesinar a Bayron Ruiz, narcotraficante que trabajó para Tony Hernández. La idea, según la fiscalía, era «evitar que ese traficante fuera arrestado por las autoridades estadounidenses y potencialmente los expusiera».
Tercera y cuarta llamada
Descrito como GX 405, la tercera llamada realizada el 29 de septiembre de 2015 por Mendoza, Campbell y Jairo Anwar (asesinado en 2020 dentro de la cárcel), exponen la conversación que los criminales mantuvieron sobre Los Cachiros, cartel del narcotráfico hondureño. En la llamada, los líderes de la MS-13 hablaban sobre cómo Los Cachiros estaban ahora bajo custodia en Nueva York y estaban jugando al “gato y el ratón” porque habían dado todas las “rutas” que “el Presidente (JOH)» les había dado como parte del “trato”.
La cuarta llamada, descrita como GX 406, la llevó a cabo «El Porky», Anwar y otros criminales. Dicha conversación se dio el 18 de noviembre de 2015, en la que discutieron una ruta particular que podrían usar para enviar dinero y otros artículos en camiones a través de la frontera. En la llamada se afirmó que “Tigre Bonilla” anteriormente había dejado cruzar la frontera “contrabando” por $5,000.
La pruebas confirman la participación de Hernández en el narcotráfico. Señala que «los participantes, que incluyen a Mendoza, Campbell y Anwar, son, por lo tanto son co-conspiradores del acusado», según la Fiscalía.
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Testigo
Los fiscales pidieron al juez Castel que un exagente de la ley (“Oficial-2”) pueda testificar en el juicio utilizando un seudónimo. El exagente va a validar la veracidad de las llamadas telefónicas.
Este testigo no solo asegurará que está familiarizado con las escuchas telefónicas presentadas en contra de JOH. Además, testificará que había revisado, durante el curso de su investigación, versiones anteriores de hojas de líneas para las escuchas telefónicas de Mendoza. Los antecedentes de los mismos de su investigación, un proceso en términos generales para la interceptación legal de llamadas telefónicas en Honduras, y el proceso mediante el cual se crean las hojas de línea.
Se espera que testifique que esas hojas de líneas incluyen información generada automáticamente por una computadora que efectúa la interceptación electrónica. Así como los identificadores únicos de las llamadas que coiciden con los nombres de los archivos de las llamadas auténticas de los Registros Hondureños.
