20.6 C
San Pedro Sula
viernes, noviembre 22, 2024

Sample Page Title

Debes leer

TEGUCIGALPA, HONDURAS. Una familia de Jalaca, una comunidad de Talanga en el departamento de Francisco Morazán, quería darle un último adiós a Óscar Aguilera, de 68 años y que murió por un paro cardíaco.

Parecía que sería un proceso póstumo convencional, aunque con medidas de bioseguridad, porque así se les exigió. Pero, justo cuando se prestaban a colocar el ataúd en la fosa correspondiente, se percataron que no tenía el peso que imaginarían.

Les pareció tan peculiar y extraña la liviandad del féretro que, en conjunto, decidieron hacer lo que se les instruyó no hacer: procedieron a abrirlo, y quedaron atónitos con el hallazgo.

La evidencia mostró que el ataúd que les entregó ésta mañana la morgue del Hospital Escuela (HE) iba bien sellado y con las precauciones necesarias, pero sin el cadáver de su ser querido. Estuvieron a sólo segundos de sepultar un cajón vacío.

De igual interés: Cadáveres siguen «apilándose» en pasillos de la morgue del Hospital Escuela

Regreso por el cuerpo

Indignados por la situación, los parientes y amigos se dirigieron desde la localidad en mención hasta el área forense del centro asistencial para reclamar por el inédito hecho.

Después de momentos de confusión, el personal reconoció el grave error. Se culpó de la situación a un «muchacho nuevo» del equipo.

El jefe de la morgue, Nelson Tercero, relató lo que supuestamente ocurrió. Contó que se montó el féretro en el vehículo tipo pick-up de los familiares. Luego, subirían el cuerpo. No obstante, el conductor arrancó y se desplazó.

Ellos -los forenses- creían que los dolientes sólo habían movido el automotor para estacionarse a otra parte. Sin embargo, nadie regresó. «Es un pequeño error», comentó la autoridad.

Además, manifestó que el hospital está abierto a una investigación y que revisarán las cámaras para conocer los pormenores de lo acontecido.

A la 1:50 de la tarde, la familia recibió, por sus propias manos, el cadáver. No obstante, la entendible molestia persistió, y la hija del fallecido exhortó a la población a que no permitan que se les ordene que no abran el ataúd, pues podrían ser engañados.

Las personas afectadas por la situación sopezan entablar una demanda contra el recinto forense.

Julissa Villanueva, exdirectora de Medicina, manifestó que lo sucedido es un irrespeto a la dignidad del difunto y su familia. «Los protocolos existen, pero lastimosamente lo que se da a demontar es el mal manejo», expresó.

Por su lado, Mauricio Corrales, presidente del sindato del HE, exigió la destitución inmediata del jefe de la morgue, argumentando que se han presentando muchas irregularidades en su administración.


? Suscríbete gratis a más información sobre la #COVID-19 en nuestro WhatsApp haciendo clic en el enlace: bit.ly/whatsapptiempo

Estás a un paso de recibir nuestro PDF Gratis

Continúa leyendo

Última Hora

Hoy en Cronómetro

    No feed items found.

error: Contenido Protegido