SAN PEDRO SULA, HONDURAS. El esposo de la mujer asesinada en Cofradía brindó declaraciones respecto a lo sucedido con el crimen, que incluso le arrebató a su hija por varias horas, y que apareció este domingo.
El hombre dijo que mataron a su esposa, para llevarse la niña, porque aparentemente, la pareja estaba «obsesionada» con su hija.
Él comentó que miró un interés especial al cuidar a su bebé. Eso lo dijo debido a las atenciones que le brindaban cuando se reunían.
No obstante, el joven relató que nunca sospecharon de ellos, y dijo que incluso se llevaba bien con él. En una entrevista relató que el supuesto amigo le comentó que su esposa también estaba desaparecida. Sin embargo, en realidad estaba con su hija.
Comentó que tenían más de un año y 6 meses juntos con la víctima, con quien tenía planeado establecer un hogar para su hija.
Cabe aclarar que una hipótesis era que este joven había violado a la mujer del supuesto autor material del crimen. Pero, según las versiones del padre, eso es falso. El nombre del padre es Roberto Quintero.
Contexto del crimen
El supuesto responsable del planificado crimen en contra de una fémina menor 17 años, se identificó como un joven de 23 años. Trabajaba como guardia de seguridad, y era originario de Santa Cruz de Yojoa. El hombre residía en una cuartería de la Colonia Las Brisas de Cofradía, Cortes.
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A él se le dio detención de manera infraganti, por el delito de femicidio. Los hechos ocurrieron el día viernes 27 de noviembre al medio día, cuando esta pareja llamó a la víctima de nombre Laura Stefany Rivera, con una bebe recién nacida, para que los visitara.
La víctima fue de visita con su bebé. Autoridades externaron que había alguna amistad entre ellos. Al llegar al cuarto de sus aparentes amigos, la estrangularon y le quitaron la bebé, según información divulgada.
La mujer sospechosa huyó y su pareja se quedó en el cuarto, tratando de ocultar su crimen. Luego procedió a embolsar el cuerpo para desaparecerlo.
Organizaron equipos de búsquedas y se dio la detención del supuesto hechor, quien en un medio de comunicación confesó su crimen. No obstante, según las autoridades, en términos legales procesales no hay asesino confeso cuando éste se incrimina en las las primeras diligencias investigativas en presencia de un defensor.
La mujer detenida tiene el nombre de Alba Delarca Pavón, de 23 años. Ella fue capturada en Arenales, Yoro, y estaba con la bebé de 4 meses.
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