Cortés, Honduras. La extorsión y la inseguridad obligaron al abogado Javier Bonilla a dejar todo en Honduras, sin embargo, no pudo lograr el sueño americano y perdió la vida durante el trayecto.
El ciudadano originario de El Progreso, Yoro, falleció por deshidratación en el desierto de Texas, Estados Unidos.
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Bonilla y su esposa tenían el restaurante La Birriada en El Progreso pero tuvieron que cerrarlo por la inseguridad y extorsión.
Con mucho llanto la fémina relató en Hoy Mismo que el 12 de abril del 2024 recibieron una nota extorsiva donde les exigieron más de 200 mil lempiras, los cuales debían pagar en menos de 48 horas.
«Nos dijeron que si no pagábamos pues ya sabíamos las consecuencias, que ellos sabían la ubicación de nuestra casa, de nuestro negocio y que sabían hasta el bufete donde trabajábamos, comenzaron las llamadas, decían que nos iban a matar», relató.
Aunque buscaron de todas las formas posibles no deshacerse de ese sustento, el 8 de junio le avisaron a su clientela sobre el cierre.
La pareja sintió tanto miedo por las amenazas extorsivas que tomaron una decisión. La esposa y su hijo, que tienen visa, se fueron a Estados Unidos, luego de estar luchando con los procesos legales.
«Mi esposo no tenía visa, él iba a intentar sacarla…En redes sociales se puede ver la cantidad de personas que lo querían, porque él tenía un corazón bondadoso, pero lastimosamente tuvo que emprender un camino, lleno de mentiras, quien lo trajo nos engañó a todos», añadió.
Hallazgo del abogado
La ciudadana expresó que perdieron comunicación con su esposo desde el jueves 13 de junio.
«Su último mensaje fue, nos vemos pronto, te amo mi amor, ya pronto estaremos juntos», prosiguió contando.
La hondureña dijo que ella logró contactar a un comandante y este buscó en el sistema, sin tener respuestas de Bonilla.
No obstante, él le comentó que únicamente tenían un cuerpo. Ella preguntó por las características y reconoció a su compañero, por la vestimenta, facciones y por una cadena que él portaba del Club Rotario.
Le informaron que su esposo ya tenía 30 horas de haber fallecido y la causa fue deshidratación.
«Me lo abandonaron, me lo dejaron ahí tirado en el camino, por eso mi esposo falleció, huyendo, él nos salvó a nosotros, pero él no se pudo salvar», externó con llanto la mujer.
Para finalizar, la esposa del abogado comentó que espera sepultarlo en Estados Unidos, pues allá es donde están sus parientes más cercanos.
