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viernes, noviembre 22, 2024

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TEGUCIGALPA, HONDURAS. Desde ayer, jueves, se está llevando a cabo el juicio oral y público contra Rommel Herrera Portillo, un joven maestro a quien se le acusa del delito de daños e incendio agravado.

Al docente se le atribuye la autoría de la quema que se efectuó contra una de las entradas de la Embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa.

De manera específica, el litigio para conocer su culpabilidad o inocencia se está desarrollando en la Sala V del Tribunal de Sentencia.

Este viernes, con música y afiches, además de pancartas en favor de Herrera, un grupo de protestantes se apostó en las afueras del Poder Judicial. Al ritmo de las canciones, claman «Libertad para Rommel«.

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El incidente

El hecho que se le atribuye a Herrera ocurrió el 31 de mayo de 2019. Próximo a la 1:00 de la tarde, agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) tuvieron noción de que un grupo de personas manifestaba frente a la embajada americana.

En un momento dado, individuos colocaron llantas incendiadas justo en la entrada del inmueble, lo que ocasionó daños en la puerta principal. Otras personas lanzaron piedras a la edificación.

Cuando la Policía Nacional arribó al sitio, los manifestantes huyeron de la escena en dirección al Hospital San Felipe; no obstante, Herrera fue aprehendido por la fuerza de seguridad.

Cronología 

El 1 de junio de 2019, se le dictó detención judicial. Por tanto, se le remitió a la Penitenciaria Nacional de Támara. En ese entonces, se dijo que Estados Unidos podría pedirlo en extradición, pero eso no sucedió.

Sin embargo, el 4 de junio del mismo año, se desveló que fue trasladado a la cárcel de «La Tolva» en El Paraíso.

El 6 de junio se desarrolló la audiencia inicial contra el sospechoso. Lo que mostró el Ministerio Público (MP) en su contra, derivó en que se le decretara auto de formal procesamiento con la medida de prisión preventiva.

El 29 de agosto, tras un tiempo de reclusión, el acusado comenzó a presentar síntomas de depresión, por lo que se le llevó a las instalaciones de Medicina Forense para que le realizaran exámenes.

Las evaluaciones determinaron que sí padecía de depresión y ansiedad. El 18 de octubre, tras la audiencia de revisión de medidas, un juez decidió enviarlo al Hospital Psiquiátrico Mario Mendoza.

El uno de noviembre, Diario TIEMPO Digital constató que el imputado ya había sido ingresado a dicho centro de salud mental.

El 19 de diciembre, se informó que Rommel Herrera iría a un Juicio Oral y Público. Esto sucedió en consecuencia de que el Juzgado de Letras de lo Penal en Francisco Morazán declaró fracasada su solicitud de procedimiento abreviado.

El caso se acerca a su final

El 11 de enero de 2020, el expediente del sospechoso ingresó al Tribunal de Sentencia. En febrero, el Tribunal de Sentencia aceptó todos los medios probatorios presentados por las partes procesales.

En aquel momento, la Sala V del Tribunal de Sentencia programó para los días 16 y 17 de abril el juicio oral y público. Empero, no se pudo realizar en esas fechas debido a que se desató la propagación de COVID-19 en el país.

Denuncia

El 31 de mayo la madre de Rommel hizo una denuncia pública. Contó que, días atrás, un doctor le aplicó una inyección a su hijo; afirmó que eso le provocó un shock anafiláctico severo.

«Eso fue porque los militares le aseguraron al médico de turno que Ronmel se quería fugar y bajo el argumento de escape se utilizó este mecanismo en su contra», manifestó.


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