SAN PEDRO SULA, HONDURAS. Para algunos hondureños con esta Semana Santa se avecina para un descanso, sin embargo, otros tomaron camino y decidieron unirse a la caravana de migrantes para tratar de alcanzar el «sueño americano».
Expertos manifiestan que muchos factores fueron detonantes, unos más grandes que otros, pero sin duda, cada persona va con la esperanza de tener una vida mejor que la que tienen aquí. Destacan historias, sufrimiento, travesías, y aunque el territorio hondureño los ha visto crecer, «no dudan en poner sus pies fuera del país».
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Algunos tomaron su mochila, víveres, su mascarilla, y se apersonaron hasta la Gran Central Metropolitana de Buses en San Pedro Sula, uniéndose a cientos más, todos «con un mismo objetivo, y determinación», relatan testigos.
Hubo quienes llegaron solos al lugar, no obstante, otros no quisieron dejar atrás su familia y emprendieron el rumbo acompañados de sus esposas e hijos. Entre el rocío de la noche, y algunas gotas de lluvia cayendo, varios compatriotas relataron las razones que los hacían dejar su país e intentar llegar a Estados Unidos.
Un ciudadano declaró a un medio de comunicación que había llegado desde Tegucigalpa. Indicó que por los diferentes acontecimientos, incluyendo la pandemia del COVID-19, los empleos «se fueron cuesta abajo» en la zona.
«Todos nos hemos quedado sin trabajo, y los trabajitos que hacemos, solo ajustan para sostenerse un día, no por varios. No es mucho lo que se gana», agregó. El compatriota manifestó que en su mochila llevaba ropa y algunos insumos de bioseguridad que le habían dado.
Otro hombre expresó que se dedicaba a la agricultura y llegó con varios compañeros desde La Paz. «La verdad hay que ser sinceros, lo que ganamos acá no nos ajusta. Lo que vamos buscando es una mejor vida, vamos con intenciones de trabajar», externó.
De igual manera, ratificó que iban en el camino sabiendo que era peligroso, arriesgándose, pero sostuvo que llevaban la confianza en Dios que los iba a guardar. «El mensaje que les doy a todos es que, hay que luchar en esta vida para poder seguir adelante».
En tanto, un hombre llegó desde San Antonio de Cortés con su esposa e hija en brazos. Al estar en el punto de partida declaró que hubo muchas cosas que lo hicieron decidirse del todo a partir en la caravana de migrantes.
«Salir adelante, salir por mi futuro, sacar a mi hija adelante», exclamó. El hondureño afirmó que por lo que más luchaba en su vida era por su esposa y su pequeña.
Explicó que aunque conocen que son caminos difíciles, deben de arriesgarse para lograr alcanzar el sueño. «Aquí nadie le va a ayudar, uno tiene que salir adelante, y seguir luchando», externó.
Aseguró que el empleo que tenía lo hacía sobrevivir el día a día, pero que no podía seguir así, pues incluso si quería construir una «casita» no tenía los recursos necesarios. «Mi sueño es mi esposa y mi hija que amo tanto. Vamos a ir unidos en el camino», indicó el compatriota.
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