REDACCIÓN- En la época de cuarentena, miles de personas han experimentado drásticos cambios en el sueño y muchos no logran conciliarlo a las horas en las que están acostumbrados, por ejemplo, el conocido insomnio, con ejercicios se puede combatir.
Estos son algunos ejercicios de respiración para un descanso óptimo: Lo primero que debemos entender es que, según la American Sleep Association (ASA), el insomnio es el trastorno del sueño más común.
Alrededor del 30 por ciento de los adultos informan problemas de insomnio a corto plazo, y el 10 por ciento experimenta problemas crónicos para conciliar el sueño o quedarse dormido.
Nuestra sociedad ocupada y acelerada, llena de tareas, largos días de trabajo, tensiones financieras, agotamiento de los padres u otras situaciones emocionalmente agotadoras, como la pandemia y el confinamiento, pueden dificultar el descanso, la calma y el sueño reparador.
Cuando hay insomnio, puede ayudar concentrarse en la respiración.
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Ejercicios de respiración para calmar la mente antes de dormir:
Respiración sencilla
Deja que tus labios se separen suavemente.
Exhala por completo, haciendo un silbido entrecortado mientras lo haces.
Aprieta los labios mientras inhalas silenciosamente por la nariz durante 4 segundos. Aguante la respiración contando hasta 7.
Exhale nuevamente por 8 segundos completos, haciendo un sonido silbante en todo momento. Repita 4 veces.
Tapando tus ojos
Cierra los ojos y respira profundamente dentro y fuera. Coloque sus dedos índices uno encima de sus cejas y el resto de sus dedos sobre sus ojos.
Luego, ejerza una presión suave sobre los lados. Mantenga la boca cerrada y exhale lentamente por la nariz. Repita el proceso 5 veces.
Ejercicio de respiración en tres partes
Tome una inhalación larga y profunda. Exhala completamente mientras te concentras intensamente en tu cuerpo y en cómo se siente.
Después de hacer esto varias veces, reduzca la velocidad de su exhalación para que sea el doble del tiempo que inhala.
Algunas personas prefieren esta técnica sobre otras debido a su simple simplicidad.
Ejercicio de respiración diafragmática.
Acuéstese boca arriba y doble las rodillas sobre una almohada o siéntese en una silla.
Coloque una mano plana contra su pecho y la otra sobre su estómago.
Tome respiraciones lentas y profundas por la nariz, manteniendo una mano sobre el pecho mientras la otra está sobre el estómago que sube y baja con la respiración.
Luego, respire lentamente a través de los labios fruncidos.