HONDURAS. En una pequeña aldea de Jutiquile, Olancho, nació Maribel Liebermann. Con el tiempo, migró y se agenció, literalmente, un sueño americano. Y es que ella no sólo iba de paseo por el país de las barras y las estrellas; llegó para ser grande.
Allá estudió diseño, ya que le gusta la moda. Sin embargo, con el tiempo descubrió que esa no era precisamente su pasión, por lo que incursionó en la cocina; inició hasta a mezclar ingredientes exóticos y, con el tiempo, se convirtió en una estrella culinaria.
Decidió que quería su propio restaurante. Por tanto, abrió una tienda de dulces y así nació su legado, su empresa y marca MarieBelle. Los productos de su chocolatería son vastos y muy populares en Estados Unidos. ¡Hasta Oprah Winfrey alabó sus chocolates!
Un detalle espectacular de lo que vende es que es 100 por ciento natural. ¿Por qué? Dado que ella se considera como una mujer que ama los alimentos que no tienen preservantes u otros químicos. Esa forma de pensar la adquirió en sus primeros años, ya que creció en el campo.
Ahora, MarieBelle tiene varias sucursales que se extienden, ¡hasta por Japón! Su marca es reconocida hasta en Dubái y Londres. Claro que también los medios de comunicación suelen resaltar sus piezas culinarias con frecuencia.
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The New York Times la destaca
En un pequeño artículo de opinión, Florence Fabricant, escribió sobre los chocolates de Liebermann, una mujer cinco estrellas.
De manera precisa, la escritora se refirió a una nueva línea de chocolates con los que la hondureña «rinde honores» a la ciudad de la gran Manzana. El comentario añadió que tienen imágenes coloridas de la Estatua de la Libertad, el Puente de Brooklyn, Wall Street y más.
Asimismo, describió que los rellenos varían, incluyendo caramelo, pistachio, espresso y «fruta de la pasión». Por último, mencionó que los dulces vienen en una caja decorada con imágenes similares -pero monocromáticas- y con su respectivo precio, 16 chocolates por 42 dólares. Además, lee «Thank You New York (Gracias Nueva York)».
Una obra de caridad
Es muy importante destacar que la venta de ese producto beneficia a «Citymeals on Wheels», que es una organización sin fines de lucro de la zona. La misma recolecta fondos para proveer alimentos y otros aportes a personas de edad avanzada.
Diario TIEMPO Digital constató, a través de la página web de MarieBelle, que por cada venta, la admirable hondureña dona 15 por ciento.
Incluso, se agregó en el sitio una descripción especial al producto. Allí, el «equipo MarieBelle» apunta que Citymeals ha entregado más de un millón de tiempos de comida a la población vulnerable de la ciudad en el tiempo de la pandemia de COVID-19.
«Nos sentimos orgullosos de aliarnos con Citymeals on Wheels en nuestra lucha contra el hambre de los ancianos en Nueva York», añade el mensaje.
Por tanto, Liebermann no sólo tiene mucho éxito en lo que hace, sino que también está ayudando a quienes más lo necesitan. No por nada ese periódico la honró, y seguro que muchos alabarán la acción que emprendió.
Quien sea que quiera comprar, donar, y probar los chocolates de la emprendedora hondureña puede entrar aquí.
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