Redacción.- El Departamento de Salud de Estados Unidos extendió este miércoles la emergencia de salud pública por COVID-19 hasta el próximo mes de abril.
Esto permitirá que millones de personas en el país puedan seguir sometiéndose a pruebas, vacunas y tratamientos.
La emergencia fue declarada por primera vez en enero del 2020, cuando empezó la pandemia del coronavirus, y ha sido renovada cada trimestre desde entonces. La actual norma iba a vencer esta semana.
Pero cientos de personas continúan muriendo por día debido al coronavirus en Estados Unidos, de acuerdo a los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Los casos diarios en Estados Unidos, que se sitúan muy por debajo del récord de enero pasado, han aumentado a un promedio de más de 67.000 hasta el 4 de enero. Y hay unas 390 muertes relacionadas con el COVID por día.
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Funcionarios del Gobierno de Biden aseguraron en noviembre la posibilidad de un aumento en el invierno boreal de los casos de COVID. También, la necesidad de más tiempo para la transición a un mercado privado para la venta de pruebas, vacunas y tratamientos fueron dos factores que contribuyeron a la decisión a la emergencia en enero.
Cuando expire, los seguros privados y los planes de salud del gobierno asumirán los costos de atención médica por el COVID para la mayoría de los estadounidenses.
La extensión de la emergencia coincide con la actual transmisibilidad de la subvariante XBB.1.5 de Ómicron. Principalmente, en el noreste de EEUU, presenta más del 70 por ciento de los casos positivos.
Las autoridades estadounidenses instaron a la población a actualizar su esquema de vacunación para ganar inmunidad contra la variante Ómicron.