REDACCIÓN. Las autoridades federales de Seattle están investigando a Huawei Technologies por supuestamente robar secretos comerciales de compañías asociadas de Estados Unidos como T-Mobile.
La investigación está vinculada a demandas civiles presentadas contra Huawei, el segundo mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo.
En las anteriores demandas está incluída una en la que un jurado federal en Seattle en 2017 encontró a Huawei responsable del robo de la tecnología robótica de T-Mobile.
La investigación indican que Huawei robó información de T-Mobile cuando uno de sus ingenieros visitó el laboratorio de Bellevue, Washington, para ver un robot de diagnóstico llamado «Tappy», que simulaba el uso de un usuario de un teléfono, de acuerdo con una persona familiarizada con el asunto.
Ante ello, T-Mobile afirmó que no fue la primera víctima de Huawei, alegando que también robó el código fuente y otros secretos comerciales de otras compañías.
La investigación está en una etapa avanzada y una acusación podría llegar pronto, informó el diario estadounidense Bloomberg.
Una portavoz de la oficina del fiscal de Seattle, Emily Langlie, declinó hacer comentarios. Al igual que un portavoz de Huawei.
¿Para qué Huawei habría robado información?
Es de mencionar que Huawei ha estado bajo una presión cada vez mayor en Estados Unidos y Europa en medio de las crecientes preocupaciones de que pueden usar el equipo de la compañía para hacer espionaje; algo que los ejecutivos de Huawei han negado.
Pese a las declaraciones de la empresa, la administración del presidente Donald Trump, ha estado presionando a los aliados europeos para que bloqueen a Huawei de las redes de telecomunicaciones.
Más problemas…
La compañía también está sumida en un caso criminal de los Estados Unidos que alega que su director financiero, Meng Wanzhou, conspiró para estafar a diferente instituciones bancarias para que estas, sin saberlo, liquidaran transacciones vinculadas a Irán en violación de las sanciones del país.
Meng, la hija del fundador de la compañía, fue arrestada en Canadá el 1 de diciembre y liberada bajo fianza hace cuatro semanas. Está a la espera de audiencias de extradición a los Estados Unidos mientras vive bajo restricciones en su hogar de un millón de dólares en Vancouver.
