CORTÉS, HONDURAS. El alcalde de La Lima, Santiago Motiño, expresó esta mañana a través de una cadena de radio que, pese a que su municipio no tiene ningún caso de Covid-19, sus habitantes son vulnerables debido a que el aeropuerto Ramón Villeda Morales continúa en operaciones y en los campos banaeros todavía se sigue trabajando.
«Estoy sumamente preocupado. Son irresponsables los de la portuaria, porque salen los furgones y no los fumigan y andan con ese montón de virus, y pasan por la calle de la Fesitranh, luego entran por el Cazenave y va a dar a la empacadora», fueron las declaraciones de Motiño.
Sumado a esto, el edil de la «Ciudad del Oro Verde» denunció que a los trabajadores de los campos bananeros, que la mayoría son de La Lima, sus patronos no les proporcionan ninguna herramienta de bioseguridad ante el peligro latente del Covid-19.
«Lo más delicado es que nosotros fuimos a inspeccionar el martes y las empacadoras no tienen ningún sistema de bioseguridad. Nadie tiene mascarillas o un bote de gel y ni siquiera hay agua en los baños. Estoy esperan a COPECO para ir a sancionar a esa transnacional», aseguró él.
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Sobre el aeropuerto de La Lima
Por otro lado, Santiago Motiño se refirió al Aeropuerto Internacional Ramón Villeda Morales, en cual sigue habilitado, aunque no para viajeros, sino para comercio.
«Cerraron Toncontín (aeropuerto de TGH), cerraron Golosón (aeropuerto de La Ceiba) y cerraron el aeropuerto que está allá en Islas de la Bahía, ¿por qué no cierran el Ramón Villeda Morales si el 95% de los empleados son de La Lima? ¡Cierren esa m***! así se los digo, cierren ese aeropuerto», declaró Motiño.
La molestia del alcalde se debe a que hay limeños trabajando en dicho aeropuerto «recibiendo aviones de carga como DHL y todos los demás» según dijo, lo cual los expone a contraer el virus y, cuando regresen a sus casas, espacirlo por todo el municipio.
«A La Lima nadie la ha ayudado»
Y finalmente, aprovechó para exgir que «suelten el dinero de las alcaldías que hace falta. Imagínese la irresponsabilidad del ministro de Finanzas. Se necesita el dinero. En La Lima nadie nos ha ayudado, pero Dios está con nosotros«.