Tegucigalpa, Honduras. La Secretaría de Seguridad informó que los reclusos de la cárcel de Ilama, conocida como «El Pozo», utilizan drones y construyen túneles para ingresar objetos prohibidos.
Según información preliminar, los túneles iban a dar a la parte posterior de la cárcel que da a un río, para introducir artefactos ilícitos a los módulos.
Del mismo modo, se descubrió que los privados de libertad utilizan bolsas plásticas, principalmente las utilizadas para agua, para construir escaleras y salir de sus áreas.
Por su parte, la directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), Migdonia Ayestas, expresó que «evidenciarlos y hacer un plan es lo importante en este momento porque se requiere voluntad política del gobierno para tratar de controlar los centros penitenciarios. Porque ya los tienen controlados ellos (maras y pandillas)».
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La cárcel
El informe de la Secretaría de Seguridad detalló que la cárcel de Ilama, Santa Bárbara, está compuesta por 76 celdas. Distribuidas de la siguiente manera: 4 módulos de mínima seguridad, 4 procesados, 2 de máxima de seguridad y 1 de taller.
De acuerdo a las autoridades, «El Pozo» tienen una capacidad máxima de 1,500 personas. Actualmente hay 1,437 privados de libertad. En ese sentido, 815 pertenecen a la pandilla Barrio 18 y 413 a la Mara Salvatrucha (MS-13). Mientras tanto, 34 son integrantes de otras estructuras y capturados por delitos comunes.
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Además, agregaron que para esta intervención se está haciendo uso de 1,408 agentes de las diferentes direcciones de la Policía Nacional (PN).
Esta operación fue el comienzo de las inspecciones programadas para las 25 cárceles de Honduras a cargo de la comisión de intervención. La cual está bajo la dirección de la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, concluyeron.