SAN PEDRO SULA, HONDURAS. Don Matri, es un cultivador de flores y frutos que ha vivido durante muchos años en la zona núcleo de el Parque Nacional Cusuco. En sus anécdotas cuenta sus importantes vivencias y las múltiples hazañas que ha realizado mientras cuida con amor y empeño, este importante lugar de la zona norte del país.
A su vez, narra que llegó al Parque Nacional, a mediados de los años 70’s. Él habría sido contratado para laborar, pero corrió con la mala suerte de que su empleador se enfermara y falleciera, un tiempo después.
El Parque Nacional logró cautivar a don Matri
El Cusuco contaba únicamente con la presencia humana de don Matri. Pero esto no fue objeto de temor para él, ya que, se sentía pleno y se había encariñado del clima y la vegetación que rodea el lugar. Para él, era de mucho agrado, vivir y trabajar en medio de la naturaleza.
Ante esto, don Matri se estableció, construyó su casa en el sitio y vivió solo por algún tiempo. Posteriormente, se casó y vivió en compañía de su esposa. Ambos se dedicaban al cultivo de flores y plantas, las cuales iban a vender a Cofradía y la comunidad de Buenos Aires; algunas veces se transportaban en bicicleta y otras a pie.
La pareja, engendró dos hijos que lograron criar en el lugar. Lamentablemente, muchos años después, la compañera de hogar de don Matri, falleció. Pese a esto, el aguerrido, decidió quedarse y continuar la «aventura», solo.
Su labor continuó en el parque, don Matri desistió de dejar el lugar que por muchos años había sido su hogar. Siguió cultivando y vendiendo las flores y frutas que junto a su esposa cultivaron en su tiempo, mismas que le ayudaban a subsistir económicamente.
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Don Matri tiene muchas anécdotas por contar
No solo ha cuidado del parque, sino, ha sido catalogado como un personaje ícono. A su vez, tiene increíbles anécdotas con qué deleitar el oído de los visitantes y turistas que llegan en busca de conocer más de El Cusuco.
Por ejemplo, don Matri asegura haber caminado por los senderos del bosque y ver que al otro lado del río un jaguar caminaba paralelo a él. Sin embargo, este animal lo vio como a un amigo y simplemente siguió su camino, hasta perderse en medio del bosque.
Aseguró haber visto de cerca, dantos o tapir, tigrillos, venados, cusucos y cuanta especie habita en este rico lugar en biodiversidad y nunca le han atacado o ha tenido problemas de convivencia con estos animales.
¿Qué ha pasado con don Matri en la actualidad?
Hoy en día, sus hijos ya no viven en el lugar, uno de ellos en algunas ocasiones llega y se queda con él. Por su avanzada edad, don Matri ya no puede trasladarse a los lugares que comerciaba sus cosechas.
Por lo que, lo hace con las personas que llegan al Centro de Visitantes del parque; además, su hijo le ayuda a realizar entrega de las flores que vende, a sus clientes.
Tiempo Digital contactó a Rodolfo Sabillón, guía turístico y director de ConoceHonduras.
Sabillón, realiza tours y expediciones a diferentes sitios en Honduras y contó que uno de los lugares que visita con mayor frecuencia, es El Cusuco. Razón por la que conoce a don Matri, su situación actual y ha escuchado varias de sus anécdotas, cada vez que lo visita.
Ante esto, Sabillón solicitó a los visitantes del Parque Nacional, que cuando realicen un tour por la zona, no dejen de ir a compartir con el valiente don Matri. Asimismo, instó a los turistas a que compren sus flores y frutas o le ayuden económicamente.
Don Matri, ha sido el guardián del parque por muchos años, entregó sus fuerzas y su voluntad, por lo que hoy, brindarle un poco de ayuda es solo un pequeño reconocimiento a lo que tanto ha hecho por el parque que tiene el lugar número 28 en el mundo, con mayor biodiversidad en el planeta.
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