HONDURAS. La población infantil podría ser un blanco fácil para la variante de la COVID-19, ómicron, así lo han dicho varios expertos en medicina, quienes aseguran que las variantes del virus respiratorio, podrían ser peligrosas si invaden el organismo de un niño.
Sobre ese asunto, el doctor Edwin Herrera Paz, expresó que lo que hace más peligrosa a ómicron, es que tiene un nivel de contagiosidad mayor que otras variantes, y eso puede ser perjudicial para las personas, en especial para los niños.
El problema de ómicron es que es súper contagioso y como es muy viral, los niños se enferman también. Las otras variantes eran menos peligrosas, manifestó el doctor a Diario Tiempo.
Niños pueden terminar en el hospital
Herrera Paz dijo que los padres de familia no deben confiarse, ya que un contagio de ómicron, puede ocasionar que un niño termine hospitalizado y necesitando de oxígeno.
«Puede provocar que un niño termine en el hospital y algunas hasta pueden llegar a necesitar oxígeno», señaló.
Aseguró que si bien la nueva variante de la COVID-19 no es tan letal, por su extrema contagiosidad, podría desencadenar un colapso del sistema sanitario en el país.
Síntomas de alerta
En lo que respecta a los síntomas de ómicron, los padres de familia deben saber que algunos malestares serán más «fuertes», que los de la COVID-19.
Actualmente, los síntomas de la ómicron varían entre fiebre, congestión nasal y cansancio físico, dijo el médico.
«Se presenta con fiebre, congestión nasal y cansancio extremo, una persona con ómicron, solo quiere dormir y estar en cama», citó el entrevistado.
Agregó que ahora hay un grave problema y es que mucha gente confunde síntomas propios de ómicron con dengue e influenza, ya que los malestares son similares, pero ómicron se presenta con mucha más fiebre y un mayor dolor corporal, apuntó.
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¿Cómo protegerlos?
El doctor Edwin Herrera Paz recomendó algunos pasos que los padres pueden seguir, para así proteger a sus niños no solo de ómicron, sino que de todas las variantes de la COVID-19.
Uno de ellos, comentó, es que los adultos de cada hogar deben seguir las medidas de bioseguridad, pues si ellos se contagian, lo más seguro es que infecten a los pequeños de la casa.
Por otra parte, argumentó que los niños deben aprender a seguir al pie de la letra las normas de bioseguridad y esperar que en un par de meses, la vacunación contra la COVID-19 para menores de edad llegue a Honduras.
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