TEGUCIGALPA, HONDURAS. Hasta los lugares más remotos de Honduras se desplazan los docentes para impartir el pan del saber a los estudiantes que no cuentan con acceso a la tecnología para recibir sus clases de forma virtual. El solo pensar en una promoción del año lectivo, lo consideran «echar a perder el sacrificio».
«Hemos hecho a partir del 16 marzo que se cerraron los centros educativos, a razón del COVID-19, nuestros hogares en aulas virtuales. De esa forma llegar a niños que tienen tecnología», dijo Bessy Berrios, presidenta del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros (PRICHMA).
«Mientras que a aquellos que no tienen, los maestros se han desplazados a los lugares remotos donde estos niños no tienen acceso a la energía y agua potable», apuntó.
La docente dijo que no hay que culpar a los docentes de que los niños carezcan de tecnología. «La culpa la tiene los que han gobernado por años», no solo ahora, todos los funcionarios anteriores, agregó.
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De igual forma, cuestionó que hasta ahora «sorpresivamente» sí piensan en los niños que no tienen acceso a la tecnología.
«Justamente ahora que los padres de familia están esperando que les haga llegar recargas para las clases en línea salen con eso (promoción del año lectivo), justamente ahora que la educación ha mandado cartillas a los docentes y esto puedan llegar a los niños que no tienen acceso a internet», señaló con indignación.
También fue clara y dijo que no van a permitir que se lleven de encuentro el trabajo que han hecho los docentes, niños y padres de familia, todo por decretos «a la carrera y mal construidos».
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