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TEGUCIGALPA, HONDURAS. La cifra de desempleados en Honduras alcanzará a más de 200,000 personas, según reportes de la Secretaría de Trabajo, aunque el ministro Carlos Madero, asegura que con la reapertura se irán recuperando.

Hasta ahora, poco más de 126,000 empleados sufrieron una suspensión. Supuestamente, luego recibir ese aviso, a estas personas se les otorgó el aporte solidario de L6,000 por tres meses.

Sin embargo, de los afectados, otros cuatro mil recibieron el aviso de suspensión de labores, pero sin gozar del aporte.

Sobre la situación laboral, el ministro expresó: “Esto probablemente vaya a ir subiendo. Calculamos que en septiembre sabremos a ciencia cierta cuántos empleados fueron suspendidos y cuántos incluso pudieran tener una terminación del contrato de trabajo”.

Por otro lado, Madero aseguró que algunos trabajadores podrían reincorporarse a sus actividades con el plan de apertura de la economía.

“Estimamos que el total de los suspendidos va a rondar un poco más de los 200,000, esto estará pendiente de verificarse hasta mediados de septiembre”, precisó el funcionario.

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Desempleados y suspendidos

Cabe recordar que, a inicios del mes de abril, Madero pronosticó que la cifra de empleados afectados llegaría a los 450,000.

Por su parte, las autoridades del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) reiteraron que al menos 500,000 trabajadores están afectados tras la crisis por COVID-19. Entre ellos hay despidos y suspensiones en empresas formales.

Alrededor del 30 % de los trabajadores de la empresa privada, sector que empleó al menos 1.5 millones de personas, dejaron de recibir un salario durante la pandemia.

Por si fuera poco, la cifra aumentaría dramáticamente con sumar la cifra de desempleo ocasionada dentro del sector informal de la economía. Así como la microempresa donde laboran cerca de un millón de personas y dejó de operar.

Recuperación de empleos

Por lo menos, alrededor de 200,000 empleos suspendidos espera reactivar la empresa privada. Este sector indicó que esa sería la mitad de los empleados suspendidos, quienes podrían reintegrarse a sus labores.

Debido a la situación, también indicaron que la mayoría de las empresas no podrán reincorporarse a sus actividades. Por lo cual, es probable que deban cerrar a causa de los altos los costos, impuestos y demás obligaciones, lo que significa más desempleados.

Por ahora, la apertura de las actividades económicas sigue en la Fase I, lo cual comprende que las empresas deben reincorporar solamente al 20 % de sus trabajadores, permitido para la denominada Región 3 que incluye San Pedro Sula y Distrito Central. Mientras que, en la Región 2 solo debe laborar el 40 % y en la Región 1 el 60 % del personal.