TEGUCIGALPA-HONDURAS. Cerca de 70 mil denuncias de violencia contra la niñez se reportan en 2020 en el país, así lo informó este domingo Héctor Espinal, encargado de comunicación del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Honduras.
A través de medios locales, Espinal detalló que las casi 70 mil denuncias se presentaron a través de la unidad del Sistema Nacional de Emergencia 911 sobre diversas formas de violencia contra la niñez.
Asimismo, el representante de Unicef dijo que la pandemia de la COVID-19 y las Tormentas tropicales Eta e Iota agravaron las condiciones de vida de los niñas y niños en Honduras.
De igual forma, indicó que los niños en el país se convirtieron en víctimas de la criminalidad. Según Espinal, los datos estadísticos revelan que diariamente mueren dos niños a causa de la violencia criminal, situación que alarma a las autoridades hondureñas.
Por lo anterior, el entrevistado afirmó que los menores de edad son víctimas de violencia en su hogar, en su centro educativo y en la sociedad.
Espinal argumentó que los menores de Honduras son mayormente víctimas de abuso sexual y maltrato infantil. Dichas agresiones se presentan en su entorno familiar.
«Necesitamos tener información precisa para tomar decisiones de cómo proteger a los niños y cómo terminar con los hechos en perjuicio contra los niños», señaló.
Para finalizar, puntualizó que los niños también siguen emigrando del país. Y que ante los enormes problemas que atraviesan los niños hondureños se necesitan grandes soluciones», concluyó el representante de Unicef.
Nota relacionada: Según la UNICEF cada 110 segundos un niño se contagió de VIH en 2019
UNICEF: Mas de 1,5 millones de niños hondureños en peligro
Semanas atrás, UNICEF alertó que más de 1,5 millones de niños hondureños están expuestos a los daños que provocaron las inundaciones que dejaron Eta e Iota en el país.
En una entrevista con EFE, Espinal, dijo que más de 1,5 millones de niños son afectados en Honduras por los efectos de las tormentas tropicales y el cierre de los centros educativos debido a la propagación COVID-19.
De acuerdo con cifras oficiales, el cierre de los centros educativos por la COVID-19 generó que más de 850 mil niños hondureños no reciban clases. Esto se presenta principalmente a los del área rural porque no tienen un ordenador, ni internet, para llevar las clases a distancia y de manera virtual.
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