TEGUCIGALPA, HONDURAS. El Sistema Nacional de Emergencias 911 se encuentra en la actualidad con las cámaras y monitores apagados, sin funcionar y sin personal vigilando las principales ciudades del país, según una denuncia divulgada.
Esta situación se mantiene desde hace varias semanas y la ciudadanía asegura que es un peligro, debido a que varios delitos se siguen cometiendo en las calles del país y nadie los observa.
Asimismo, hondureños y autoridades afirman que el hecho de que las cámaras estén apagadas aumentan el riesgo y la criminalidad, principalmente en las ciudades más grandes del país.
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Hace algunos días y de manera anónima, empleados del 911 denunciaron a través de un audio la situación en que se encuentra este servicio. A la vez, indicaron que las llamadas las atienden con una app gratuita, pero que ya caducó.
¿Pasaría a manos de la Policía Nacional?
Según la denuncia que se interpuso en Radio Cadena Voces, existen amenazas contra los actuales empleados sobre despidos. De la misma manera, circula que el 911 pasaría a la administración de la Policía Nacional.
«No tenemos garantía ni estabilidad laboral, se nos adeuda ya 2 meses y fracción. Desde diciembre nosotros no miramos un centavo, a parte de una bonificación que se nos da por ley y reglamento y la verdad es una situación terrible», indicó el denunciante.
La crisis en el 911 se origina de la falta de renovación de contratos con la empresa que brinda el servicio de las cámaras. Este tiene un costo de más de 100 millones de dólares para el Estado de Honduras.
Los expertos afirman que las cámaras son herramientas útiles, pero sin operar aumenta la criminalidad. También, mencionan que hay falta de pruebas en los tribunales de justicia porque no existe la evidencia en físico.