TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Por conducta impropia ante sus alumnos, una madre de familia denunció públicamente a un docente de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM).
Rebeca Becerra es la mujer que determinó publicar el maltrato que padece su hija en las tres clases que recibe del docente Óscar Amaya Armijo.
«A lo largo de mi vida me he encontrado personas maravillosas, humanas, sensibles, incapaces de causar algún daño pero también personas que se dedican a hacer el mal a escondidas y presentan una cara y actitud ante la sociedad completamente contraria a lo que realmente son», según Becerra.
Pese a que las clases son virtuales, su hija le comentó que «ha tenido y está teniendo una abominable y asquerosa experiencia en tres de sus materias matriculadas por la violencia emocional y psicológica que está sufriendo de parte de un docente».
«Debido a esto ha retirado una de las materias, ya que es un desgaste emocional y de energía escuchar a este individuo tres horas seguidas de lunes a jueves», contó en la red.
Quejas sobre catedrático de la UPNFM
Según la mujer, amparada en el marco internacional jurídico que protege a la comunidad educativa de todo tipo de violencia y el marco jurídico nacional sobre violencia, «denuncio que este individuo ya ha sido reportado varias veces en la institución donde labora, a tal punto que ha sido trasladado del Departamento de Letras y Lenguas Extranjeras al Sistema de Educación a Distancia y por denuncias terminó en el Departamento de Educación Artística desarrollándose siempre como docente».
«Al contrario, lo que han hecho es moverlo dentro de la misma institución pese a su mal proceder. ¿Cómo es posible esto? Pues muy fácil, la complicidad defiende a los violadores de los derechos de los estudiantes y oculta la violencia», detalló.
En ese sentido, agregó que a los alumnos no les queda más que callar porque quieren aprobar sus materias.
«Denuncio a Óscar Amaya Armijo, quien en este tercer período académico imparte las asignaturas de Historia Social del Arte, Gestión Cultural, Semiótica y Cultura Popular por violencia emocional y psicológica».
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«Por el poder del docente se vuelven víctimas»
A criterio de la madre de familia, siendo el docente una figura de poder frente a los alumnos, estos se vuelven víctimas y responden a cualquier barbaridad que pregunte el docente, ríen por pánico, saludan y se despiden amablemente con pánico y con incomodidad porque quieren aprobar sus materias.
«En las 3 clases que lleva mi hija ha habido deserción alta, no puedo asegurar que sea por su actitud sino por otras razones, aunque no dudo también que esta deserción se deba por todas las vulgaridades que expresa en sus clases».
Ante esa conducta pidió a las autoridades no ser cómplices de ese docente y proceder de forma inmediata.
Internautas atacan a la denunciante
Entre tanto, en los comentarios de la publicación alumnos y allegados al catedrático señalado se han manifestado argumentando que tanto la hija como ella deben de entender el arte.
«Hola señora. Yo no soy alumna del maestro, pero veo que usted no es una persona seria, no entiende el arte no entiende sobre el derecho y le puede perjudicar en todo lo que escribió. Pero bueno, al final quien quedará mal es su hija y usted», dice un comentario en la publicación.
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De igual manera, gran parte de comentarios apoyaron la causa y un usuario publicó que siente vergüenza al leer los comentarios y se solidarizó con ella y su hija. «Siento mucho que estés pasando por esa situación mi estimada».
Como argumento, Becerra publicó en los comentarios las siguientes fotos, aquejando que es penoso que sus alumnos lo representen así. «Quiero enseñar cómo lo representan sus alumnos y él se siente orgulloso de esto. Es un asco. Penoso».
Asimismo, varias personas le recomiendan a la mujer tomar acciones con la UPNFM, ya que hacerlo a través de las redes sociales le puede generar problemas a ella. Diario Tiempo intentó comunicarse con Becerra, pero todavía no responde.
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