TEGUCIGALPA, HONDURAS. El cuerpo de defensa del ingeniero David Castillo, acusado del asesinato de la ambientalista Berta Cáceres, emitió una denuncia sobre las presiones que existen en el juicio llevado a cabo en los últimos tres meses.
La denuncia es pública, dirigida a la opinión pública nacional e internacional, autoridades gubernamentales de Honduras y a los diferentes medios de comunicación.
El documento detalla en su primer numeral que el proceso de juicio casi duró dos meses y lo realizó la Sala Primera del Tribunal de Sentencia, sin embargo, ni el Ministerio Público ni sus acusaciones han podido derribar la inocencia de David Castillo.
Asimismo, el texto denunciante puntualiza que varias organizaciones internacionales y nacionales han activado un plan injerencista. El objetivo, explican, es influir en la decisión de los jueces, justo en el momento que se han retirado de juicio para deliberar el fallo en el caso de Castillo.
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Plan en contra de Castillo
De acuerdo a lo indicado en la denuncia, ya se hizo una acción para ejecutar un plan en contra de David Castillo. El mismo lo realizó un grupo de diputados del Parlamento Europeo y los encabeza Tilly Metz, Miguel Urbán y Javi López.
Los mencionados, según lo indica el documento emitido por la defensa de Castillo, han enviado una carta a las autoridades hondureñas. Esta indica cómo es que deben de fallar los tres impartidores de justicia que conocen las pruebas en el proceso.
Además, el documento puntualiza que hace un mes, justo en el momento que los acusadores terminaron con la presentación de pruebas y después que ninguno de los medios de prueba inculpara a Castillo, comenzó un proceso de acoso al sistema de justicia.
Indican que las pruebas del Ministerio Público ni la de los abogados de la familia de Berta Cáceres pudieron desvirtuar la inocencia de David Castillo. El acoso al sistema judicial viene de organizaciones nacionales e internacionales y No Gubernamentales, denuncian.
Asimismo, la denuncia de los defensores de David Castillo menciona que un día después de que finalizó el juicio, y en medio del tiempo de deliberación, volvió una horda a intimidar a los operadores de justicia.
Lo que ha hecho es enviarle una carta al mandatario hondureño Juan Orlando Hernández, a varios de los ministros de gobierno, al presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Rolado Argueta, y al fiscal general, Oscar Fernando Chinchilla.
Presiones evidentes
En tal sentido, la denuncia asegura que las presiones «tan evidentes» a las autoridades constituidas son violatorias al Derecho Internacional, pues tiene «tintes de racismo y supremacía blanca».
Por esa razón hacen ver al país como una colonia de las coronas, sobre todo, porque atentas contra las garantías, indica el escrito. Esas mismas garantías que están contenidas en los Tratados Internacionales sobre los Derechos Humanos que protegen a Castillo, afirma la defensa.
Por último, el documento emitido por la defensa de David Castillo señala que ante estas circunstancias, hacen una solicitud. De manera respetuosa piden a las autoridades de Honduras y en particular a los jueces que están deliberando que actúen con objetividad e independencia.
Es decir, que se basen de manera exclusiva en las pruebas que se presentaron durante el debate del juicio. Las mismas deben analizarse de manera sana y no pueden producir más que el fallo de inocencia para David Castillo.
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