COMAYAGÜELA, HONDURAS. Un lote de pólvora valorada en unos 2 millones de lempiras quedó bajo tenencia policial luego de un operativo que se desarrolló este jueves en el sector de El Chiverito en Comayagüela, ciudad capital de Honduras.
El material, cuya venta está prohibida en el Municipio del Distrito Central (MDC), se encontró en una bodega clandestina.
De acuerdo al listado provisto por las autoridades, se incautaron morteros, volcanes, luces artificiales, cohetes, metralletas y demás.
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Procederán contra los vendedores
«Este producto no es permitido en Tegucigalpa y Comayagüela«, aseveró Josué Esperanza, portavoz de la Policía Municipal. Él, a su vez, externó que ya tienen identificado al propietario de la mercancía.
El hombre, de quien no se brindó más detalle, tendrá que pagar una multa de 35 mil lempiras. Además, se prevé que se emitirá un requerimiento fiscal contra él por el delito de desacato a la ordenanza municipal.
«Nosotros, como Alcaldía, buscamos evitar que nuestros menores de edad resulten quemados producto de la pólvora», expresó Esperanza.
Y prosiguió: «Vamos a seguir haciendo estos operativos y se han a realizar las investigaciones correspondientes para dar con los dueños de este tipo de bodegas y así deducirles las responsabilidades administrativas y penales».
Cabe decir que, además de los elementos de la Policía comunitaria, en la actividad también se contó con la presencia de miembros de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y representantes del Ministerio Público (MP).
Después de que se llevó a cabo el decomiso del producto, se subió a las pailas de algunas patrullas policiales y se llevó a un área controlada; allí, el personal encargado de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) procedió a la incineración.
Consecuencias de la manipulación de pólvora
Hasta la fecha, se han reportado tres incidentes relacionados a la pólvora en este tiempo dicembrino de 2020. TIEMPO ha informado de todos ellos.
El primer caso fue el de Justin Joshua Hernández de solo 15 años de edad, a quien le explotó un «cuete» en su mano derecha, dejándolo con severas quemaduras. Eso ocurrió el 26 de noviembre.
Cuatro días más tarde, el 30, se registró la primera incidencia mortal. Nerlyn Josué López, de 23 años, falleció en Los Rincones, Choluteca, luego de que un mortero le estalló en el área abdominal.
El otro caso, que causó mucha conmoción, fue el de Cristian Abigail Aguilera, de 24 años. Al parecer, ella se encontró con un mortero en la calle; cuando se agachó a recogerlo, de inmediato explotó en su mano. Perdió tres dedos.
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