Miembros de Hamás han disparado más de 400 cohetes hacia Israel en medio del pico de violencia y tensiones en la región. Menos de 20 cohetes traspasaron su principal protección: la Cúpula de Hierro, el sistema antimisiles interceptó la mayoría.
El escudo ha funcionado desde casi una década y forma parte de los instrumentos que permiten que Israel mantenga un predominio militar sobre sus vecinos.
El Ministerio de Defensa divulgó las imágenes sobre cómo el sistema interceptó un misil de Hamás sobre Ashkelon protegiendo a Israel.
El sistema de escudo aéreo ha sido pieza clave para la defensa del país frente a los cohetes que parten desde la Franja de Gaza, pero también ante las fronteras de Líbano, Siria y la amenaza iraní.
En el mes de marzo, Israel presentó una nueva versión de su escudo antimisiles. Se desplegó en las fronteras con Gaza, Líbano y Siria, y ahora puede interceptar “simultáneamente” cohetes, misiles y drones.
Si bien esta batería antimisiles no puede bloquear los globos incendiarios y otros proyectiles lanzados a muy baja altura, sí puede contrarrestar tanto los misiles como los drones.
El ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, en un comunicado dijo que “la Cúpula de Hierro ha sido probada en una variedad de escenarios complejos y ha interceptado drones, cohetes y salvas de misiles simultáneamente”.
Además, mencionó que los principales focos de amenaza que sufre Israel provienen de los terroristas de Hamás y Hezbollah, pero que también están en alerta permanente ante los misiles balísticos de largo alcance de Irán.
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HISTORIA DE LA CÚPULA DE HIERRO
En 1991, durante la guerra del Golfo, el general Daniel Gold, investigador del Ministerio de Defensa, dijo que Israel requería un dispositivo capaz de destruir misiles en pleno vuelo.
Las fuerzas de Saddam Hussein lanzaban cohetes Scud contra Tel-Aviv, y la urbe se vació de sus habitantes, dijo a la AFP durante una entrevista en el Ministerio de Defensa: “Había que hacer algo”.
Tras 15 días, el general Gold y su equipo concibieron unos veinte prototipos antes de abandonarlos. Luego crearon un sistema con socios del sector privado de la defensa.
“Presagiaba que los disparos de cohetes se convertirían en una amenaza mayor para Israel, para la que no había entonces solución”, dijo. Sus superiores no consideraban la defensa antimisiles como una prioridad.
Cuando la Cúpula de Hierro se elaboraba, el movimiento islamista Hamás tomó el control de Gaza y lanzó cohetes y otros proyectiles hacia el territorio israelí.
Hubo que esperar a 2011 para que la famosa “cúpula” fuera desplegada. Era esencial para “salvar vidas” y “garantizar algo parecido a la vida normal en Israel”, argumentó. Inclusive cuando caía una lluvia de cohetes, era necesario que los habitantes pudieran “al menos ir a trabajar”.
Desplegado hace más de una década, el sistema produjo de antemano el escepticismo sobre su eficacia. Luego interceptó miles de cohetes palestinos provenientes de la franja de Gaza, generando honores a su creador y cambiando el panorama militar de la región.
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