TEGUCIGALPA. El experto criminólogo, Gonzalo Sánchez, cuestionó la no intervención de la Secretaría de Seguridad ante el Ministerio Público ya que de acuerdo al artículo 203 del Código Procesal Penal a quien le correspondía evaluar la escena del crimen de Sherill Hernández, agente ATIC, es a la Dirección Policial de Investigación (DPI).
«Debemos haber permitido que la DPI se hiciera cargo», declaró Sánchez. Solicitar después a la Fiscalía que la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) participara solo como observador de la escena del crimen.
Cabe recordar que ya casi se cumple un mes de la muerte de Hernández de 29 años, jefa de la Unidad de Delitos Contra la Administración Pública de la ATIC.
Sin embargo, se generó cierta suspicacia en cuanto a las hipótesis del crimen que determinaron dos instituciones del Ministerio Público. En cuanto a esto, la ATIC evaluó el lugar de los hechos sin intervención de expertos y determinó que su compañera se suicidó.
No obstante, el equipo de Medicina Forense en el examen de autopsia especificaron que los resultados arrojaron que la muerte de la fémina es un homicidio. «No puede ser que la ATIC y Medicina Forense que son de la misma institución den dos versiones diferentes», dijo.
En consecuencia, explicó que la ATIC no tiene la capacidad solvente para investigar un suicidio que son las muertes más difíciles. Sánchez asegura que para analizar una escena del crimen se requiere de capacitación y un entrenamiento de primer nivel.
En la ATIC y en la DPI es el mismo problema
Jair Dixon Herrera, exfiscal, advierte que el problema son los niveles de injerencia de otros factores como política corrupta del país. «Gente del crimen organizado ha entrado en las instituciones y eso ha provocado que estas se contaminen», explicó.
Herrera asevera que «la corrupción siempre viene de arriba hacia abajo». El problema es cuando intervienen estos factores que se empiezan a manipular todo. «Entonces los agentes utilizan su cargo o su licencia para delinquir», indicó.
«Virus terrible» así considera Herrera a la injerencia política corrupta del país en el sistema de administración de justicia. Por otro lado, el exfiscal recomienda que a la ATIC se le debe revisar y poner un alto desde ahorita. De esta manera, especifica que este es un compromiso que lo tiene que asumir el Fiscal General de Honduras.
Homicidio o suicidio
Gonzalo Sánchez manifiesta que no es cierto que la última palabra la tiene Medicina Forense. «Yo en lo personal no necesito de un dictamen de los forenses para que me digan que es un suicidio o no», señaló Sánchez.
A la vez expresa que los doctores forenses solo tienen un cuerpo al que van a hacer un examen. Es decir, una autopsia del cuerpo «que me va a decir la hora de la muerte nada más y la causa de la muerte eso es todo», puntualizó el criminólogo.
«Sin embargo, existe un trabajo de campo realizado dentro y fuera de la escena por expertos. Medicina forense no me va a decir a mí si es homicidio o asesinato, eso lo dice el criminólogo», señaló.
De parte del exfiscal explica que un agente no puede determinar la muerte de una persona sin antes tener un dictamen de los forenses. Además, especifica que «ni un fiscal puede decirlo hasta tener un expediente y todas las pruebas científicas».
Herrera dice que la institución ATIC perdió credibilidad al dar un dictamen que posteriormente las ciencias forenses emitieron otra.
Análisis Criminológico del suceso
La policía científica del mundo ya lo dice. Las muertes más difíciles de investigar son los suicidios no los homicidios, aclara Gonzalo Sánchez, criminólogo.
Por medio de un equipo de investigadores bien entrenados, bien capacitados, «no necesitamos un dictamen forense». Lo anterior, lo cuestiona para establecer si es un suicido «yo lo puedo corroborar», continuó.
- Se debe hacer un análisis psicológico y psicodinámico centímetro a centímetro y una observación minuciosas del crimen.
- Revisar la palma de la mano si hay ahumamiento, eso orienta que puede ser suicidio.
- Siempre que una persona se dispara quedan salpicadura en los dedos de la mano.
- Luego la trayectoria de la bala que es abajo hacia arriba.
- Preguntar a los familiares, parientes las fases psicológicas previas al suicido para descartarlo.
Ejemplo: si tiene problemas emocionales, si se divorció, sentimentales, depresiones, si había perdido su trabajo. «Hay una serie de cosas que se pueden investigar en la escena del crimen de esta persona», así concluyó Sánchez.
