TEGUCIGALPA, HONDURAS. Cada vez son más las personas que mueren tras complicaciones relacionadas a la COVID-19 en carpas de los centros de asistenciales que atienden en primera fila al nuevo coronavirus, esta vez fue el conocido odontólogo, Felipe Ordóñez, de 58 años de edad.
El especialista en esa rama de las ciencias de la salud de San Lorenzo, Valle, falleció este miércoles en una de las carpas del Hospital Escuela de Tegucigalpa. Según personal que se encontraba en esa área, el odontólogo pereció mientras esperaba atención médica.
De esa misma forma, han muerto muchos pacientes positivos por COVID-19, llegan a las carpas instaladas en los hospitales y fallecen al poco tiempo. Entre ellos, hay personas que necesitan oxígeno y otras que llegan muy tarde.
El hijo del reconocido odontólogo, Otoniel Ordóñez, comentó que los galenos de San Lorenzo lo habían examinado y el diagnostico no era alentador. Como resultado de la falta de mayor atención, días después él murió por un cuadro crítico resultado de la COVID-19.
«Mi papá murió porque le dieron mal diagnóstico en la zona sur, él falleció por COVID-19», manifestó apesarado.
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COVID-19 sigue avanzando
Hasta ayer martes 14 de julio, el reporte de casos positivos informados en cadena nacional por el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager), registró un total de 29, 106 casos confirmados a nivel nacional. De ese exorbitante número 25,012 casos son activos.
Además, el número de muertos a causa de este virus altamente contagioso ha registrado a 807 pacientes. Asimismo, por fortuna existen 3,287 recuperados de la COVID-19.
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