REDACCIÓN. ¿Se está preguntando cómo quitar las uñas en gel en casa? Esta tendencia de uñas llama la atención por la elegancia y el estilo que le aportan a las manos. No obstante, así como se colocan, después de cierto tiempo hay que retirarlas.
Hay cuidados que se deben tener en cuenta para que al momento de extraerlas no genere daños sobre la superficie de las uñas.
¿Qué son las uñas en gel?
Las uñas en gel difieren de la manicura común en los productos utilizados. En este caso, en particular, se emplea un esmalte en gel que se endurece con la ayuda de una lámpara de luz ultravioleta. Mientras que en el esmaltado tradicional solo se complementa con una capa protectora de brillo.
Si bien es cierto, este último tiene la función de aumentar la durabilidad de los productos, luego de un par de días empieza a deteriorarse. En cambio, el esmalte semipermanente usado en las uñas en gel puede tener una duración de hasta 15 días.
Pasado ese tiempo, se comienza a notar el crecimiento de la uña, se deteriora el esmalte y el brillo se empieza a apagar. En el caso de las uñas postizas o acrílicas, sucede lo mismo y se producen pequeños orificios entre estas y la cutícula, lo que da como resultado un aspecto desprolijo y descuidado.
¿Cómo quitar las uñas en gel en casa?
Materiales necesarios
- Lima de uñas
- Acetona
- Algodón
- Papel aluminio
- Empujador de cutículas
- Vaselina o crema hidratante
- Esmalte reparador de uñas o calcio
Paso 1
Lime las uñas ligeramente
El primer paso es limar las uñas para crear una superficie más porosa y facilitar así la penetración de la acetona. La idea es quitar el brillo y la suavidad que le da el esmalte.
Luego de sacar el polvillo, aplique la vaselina en la zona de la piel, procurando que no pase a la uña. Su finalidad es brindar una capa de protección a la piel para contrarrestar los efectos adversos de la acetona.
Paso 2
Aplique la acetona
Una vez que termine con el paso anterior, las uñas le habrán quedado ásperas, opacas y rayadas. Sin embargo, el color del esmalte continúa presente, ya que lo que eliminó es la capa protectora.
A continuación, separe 10 trozos pequeños de algodón y empápelos de acetona. Cubra con ellos la punta de los dedos, como formando un gorrito.
Lo ideal es que el algodón se pegue bien a la uña, por lo que debe recortar 10 rectángulos pequeños de papel aluminio y colocar cada uno de ellos sobre los dedos, ejerciendo una suave presión.
Paso 3
Quite el aluminio y los algodones
Una vez que haya quitado todos los algodones, notará que el esmalte aún está presente, solo que se ablandó y debería salir prácticamente sin ayuda. No frote el algodón en las uñas como lo haría con un quita esmalte común.
Si ha quedado esmalte, ayúdese con el empujador de cutículas para remover los restos que puedan estar presentes. Presione con cuidado desde el nacimiento de la uña hasta el final.
Es importante destacar que las uñas quedan más finas y muy sensibles, por lo que es necesario que tenga mucho cuidado al utilizar el empujador de cutículas.
Paso 4
Recupere las uñas
Cuando haya terminado de quitar todos los restos de esmalte, lave sus manos con abundante agua y jabón. Aplique un producto para comenzar la recuperación de sus uñas. Proceda a cortar las uñas y a limarlas antes de hidratarlas.
Es probable que el aspecto de las uñas no sea el esperado, así que puede aplicarse aceite de almendras, de coco o cualquier bálsamo hidratante.
Una vez que se haya absorbido el aceite, elija un esmalte de calcio y vitaminas para que queden hidratadas. El brillo del esmalte reparador mejorará su aspecto.
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