GUATEMALA. La Policía Nacional de Guatemala informó en las últimas horas que realizaron el hallazgo de un cuerpo sin vida, perteneciente a un hondureño, en Chiquimula, Santa Rosa.
De acuerdo al informe de las autoridades, el ciudadano estaba colgado con una soga de un puente en el kilómetro 117. Además, el cadáver ya estaba en estado de descomposición.
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Al compatriota lo identificaron por la tarjeta de identidad que portaba. Su nombre era Elmer Osmar Gutiérrez Pineda y tenía 26 años de edad.
Por otro lado, se conoció que él era originario del municipio de Yamaranguila, departamento de Intibucá. Cuando hallaron el cuerpo, vestía una camiseta de color blanco, acompañado de un jean azul oscuro y unos tenis.
Las autoridades indicaron que los familiares del hondureño pueden comunicarse con el señor Manuel Cáceres al número +502 5556-4932 para poder hacer los trámites de repatriación del cuerpo.
Si no se comunican, los médicos forenses informaron que llevarán el cadáver a una fosa común. De momento se desconocen más detalles. De igual forma las autoridades investigarán para confirmar si el hondureño iba como migrante.
Otro caso: Hondureño provoca un caos en México
El pasado 13 de marzo, un presunto inmigrante hondureño provocó un caos en una de las principales calles de la Ciudad de México, pues se habría escapado de un hospital y aseguraba que lo querían hacer «picadillo».
Según un noticiero de la cadena Imagen Televisión, el hombre se había escapado del Hospital General Xoco. Al parecer, logró burlar la seguridad de ese lugar y huyó rumbo a una de las colonias cercanas al centro hospitalario.
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Una vez el inmigrante llegó a una de las principales calles de la Ciudad de México, empezó a gritar que los agentes policiales intentaban hacerle daño. Los gritos del hombre atemorizaron a los transeúntes. Asimismo, el presunto hondureño, se había escapado del hospital semidesnudo y con un collarín en su cuello.
Todo el hecho quedó grabado en unos videos que las personas grababan al ver al tipo corriendo por las calles y gritando «me quieren hacer picadillo«. Ante la situación, varios uniformados persiguieron al hombre tratando de capturarlo y así evitar que se hiciera daño o que le hiciera daño a otras personas.
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