TEGUCIGALPA, HONDURAS. Un aumento en la apropiación ilegal de tierras privadas se ha registrado en las últimas semanas, así lo denunciaron las autoridades del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP).
Ese delito ha provocado estragos en la economía hondureña pues según informes, ante la usurpación de terrenos privados, muchas de estas propiedades agrícolas, han ocasionado que unos 236 millones de dólares en productos de comercialización, no se hayan exportado.
Según el COHEP, detrás de estos «robos» de terrenos, están bandas criminales que suelen tomar a la fuerza muchas propiedades privadas, para cometer actos ilícitos.
Para profundizar más en el tema, Diario Tiempo Digital, platicó con el asesor legal del COHEP, Gustavo Solórzano, quien manifestó que de no ponerle un alto a los criminales, las consecuencias a largo plazo puede ser terribles.
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«Robos» preocupantes
Solórzano aseguró que es algo sumamente preocupante, pues los «robos» solo son un claro y evidente delito a la propiedad privada de las personas.
Comentó que las autoridades gubernamentales deben hacer algo pronto para detener estas acciones criminales, pues de lo contrario, afectarán a las inversiones del país.
«Si no se le pone un freno, van a seguir más personas cometiendo estas actividades ilícitas y ante este tipo de situaciones, como las que estamos viviendo, esto lo único que genera es inseguridad jurídica y por lo tanto no habrá inversiones», dijo Solórzano.
El asesor expresó que en la costa norte de Honduras, el «robo» de propiedades privadas está a la orden del día, donde sectores de palma africana y caña de azúcar han denunciado que malvivientes les han arrebatado sus tierras. Asimismo, en la zona sur registran apropiaciones ilegales en zonas agrícolas y ganaderas.
También, agregó que ya el COHEP ha hecho denuncias ante las autoridades correspondiente y también ante el Congreso Nacional.
Buscar reformar el delito
«Buscamos que el delito de usurpación como tal, pueda reformarse en el código penal, pero también crear un proceso legal en el código procesal penal», acotó Solórzano.
Con esa iniciativa se quiere lograr un solución y poder lograr una disminución en la invasión de tierras en Honduras, detalló.
Por otra parte, sostuvo que se han dado cuenta que los grupos criminales no son los únicos delincuentes. Según dijo, hay personas que aceptan comprar terrenos de manera fraudulenta, lo que los hace parte del acto criminal.
Finalmente, Gustavo Solórzano exclamó que si las autoridades no les dan soluciones a los hondureños que son víctimas de estas invasiones, la población se terminará «cansando» y «tomarán la justicia por sus propias manos».
Él catalogó eso como un futuro preocupante. Explicó que Honduras ya es bastante conflictiva como para que ahora campesinos y criminales se enfrenten, concluyó.
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