TEGUCIGALPA, HONDURAS. La presidenta del Colegio Médico de Honduras (CMH), Suyapa Figueroa, volvió a referirse al caso del hombre con un bote de loción en el recto señalando a las redes sociales como herramienta enfermiza por hacer viral la información.
El vídeo muestra el momento justo cuando personal médico extrae un frasco de loción del recto de un paciente. «Toda esta situación de las redes sociales se vuelve enfermizo», enfatizó Figueroa. Al tiempo que mencionó que con ello también se daña la ética.
De igual forma, añadió que los médicos no pueden hacer trascender información que no tiene beneficio para los pacientes. Sumado a ello, destacó que los vídeos a pacientes deben ser con el consentimiento del mismo y para fines académicos.
En este caso, hasta ahora no se han señalado los responsables de haber difundido el vídeo. Sin embargo se continúa con la investigación.
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CMH pide ayuda extranjera
La representante de los médicos en Honduras detalló que solicitaron ayuda al Colegio de Deontología de España. Según la experta, con el objetivo de promover los valores éticos y reforzar los principios del gremio.
Por lo que detalló que ha sostenido reuniones con el presidente del gremio español, Juan José Rodríguez; quien estuvo en Honduras en los últimos días y retornó ayer a su país.
En la reunión «se establecieron rutas a seguir para evitar estas situaciones».
Es un hecho aislado
Para la presidenta del CMH, el acontecimiento no es propio de un médico en Honduras, «este es un caso excepcional», dijo enérgicamente la experta.
«Nosotros consideramos que los médicos de Honduras tienen ética y un comportamiento adecuado y hasta hacen más en una sociedad que no garantiza nada», siguió diciendo.
El caso
El pasado 2 de octubre ingresó a la sala de emergencia del Hospital Escuela Universitario (HEU) un hombre con un bote de loción en el recto. El portavoz, Miguel Osorio, detalló que el incidente se suscitó cuando el paciente mantenía relaciones sexuales con su pareja.
El caso se hizo viral porque supuesto personal médico grabó la intervención y filtró el vídeo en medios de comunicación y redes sociales, dañando la integridad del paciente y violentando el código de ética que se maneja en ese instituto médico.
