SAN PEDRO SULA. Muchos proyectos de infraestructura, entre carreteras y edificios, se están desarrollando en Honduras, representando un crecimiento positivo en la industria de la construcción aunque muchos de estos proyectos son ejecutados por empresas pequeñas y sin experiencia, llamadas también de maletín, según denuncia un representante de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (CHICO).
Así lo expresa Silvio Larios, representante de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción, CHICO, quien opina que el Estado está siendo irresponsable al conceder los proyectos.
CHICO: SON UNA PERDIDA PARA EL ESTADO
“Las entidades que se han contratado son pequeñas empresas que no cuentan ni con el equipo ni con la experiencia necesaria para ejecutar los proyectos que muchas veces son millonarios. Ellos terminan subcontratando a otras empresas, representando una pérdida para el Estado” señaló Larios.
Así mismo, propuso revisar los contratos uno a uno y “meter a la cárcel a los funcionarios que no respetan la Ley de Contratación del Estado” ya que actualmente sólo se toman medidas administrativas contra estas empresas.
2016: Un año positivo para la construcción
En una entrevista reciente, Juan Carlos Sikaffy, vicepresidente de CHICO, estimó que la inversión pública proyectada para 2016 ronda los L10, 000 millones y la privada podría alcanzar los L6, 000 millones y se estima un crecimiento de 25% a 30%, en comparación con lo cifrado en 2015.
Para Sikaffy, Honduras necesita mucha inversión inteligente porque tenemos que priorizar los escasos fondos con que se cuenta y se necesita que estos proyectos tengan la mayor incidencia en la economía del país.
También se debe gestionar que las obras que se ejecuten con fondos gubernamentales, que surgen de los impuestos que pagan los hondureños, las desarrollen compañías nacionales para que todas esas utilidades se reinviertan nuevamente aquí y se convierta en un círculo virtuoso en beneficio de la economía del país.
