SAN PEDRO SULA, HONDURAS. La Policía Nacional dio captura a dos hondureños por suponerlos responsables del delito de cobro de extorsión en la ciudad de San Pedro Sula, Cortés, al norte de Honduras.
La acción la ejecutó la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO), en el barrio Concepción de la ciudad industrial, gracias a las denuncias interpuestas por ciudadanos.
Los aprehendidos responden a los nombres de Arnol Juventino Sandoval Escobar, alias «El Negro», de 26 años de edad, originario de San Pedro Sula. Según se detalló, este detenido se dedica al oficio de mecánico automotriz.
Mientras tanto, la segunda detenida es una fémina comerciante de 44 años de edad, llamada Silvia Jackeline Márquez Flores, alias «La Marimacha».
Según mencionaron las autoridades, estos individuos estaban cobrando más de 65 mil lempiras en extorsión cuando los capturaron.
Las investigaciones han determinado que ambos detenidos son miembros de la organización criminal Pandilla 18, desde hace aproximadamente 2 años.
Asimismo, las indagaciones afirman que los acusados actualmente se desempeñaban como los principales recolectores del dinero producto de la extorsión.
A los detenidos se les decomisaron dos teléfonos celulares, con los cuales realizaban las llamadas y mensajes extorsivos, dinero en efectivo y un vehículo turismo.
Los arrestados fueron remitidos a los Juzgados correspondientes, donde responderán por el delito que se les imputa.
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DIPAMPCO detuvo el 24 de octubre en San Pedro Sula a una fémina vinculada al delito del cobro de extorsión en la aledaña ciudad de La Lima.
De acuerdo con las autoridades, ciudadanos denunciaron que estaban siendo intimidados por la detenida, que les exigía dinero.
El operativo se llevó a cabo específicamente en el antiguo peaje, ubicado entre las dos ciudades antes mencionadas, por agentes de investigación de la DIPAMPCO en coordinación con un equipo del Distrito 8-3 de la Policía Preventiva.
La detenida responde al nombre de Joselin Nicol Ramírez Portillo, alias «La Nicol», de 21 años de edad y originaria y residente del municipio de La Lima.
Los funcionarios que participaron en el operativo informaron que «La Nicol» tiene aproximadamente un año de ser miembro activo de la Pandilla 18, y era la encargada de realizar llamadas para amenazar y cobrar el «impuesto de guerra» a los dueños de negocios establecidos en La Lima.
A la arrestada se le decomisó dinero en efectivo, presuntamente obtenido mediante el cobro de la extorsión, además de un teléfono celular.
