TEGUCIGALPA, HONDURAS. Hace unos meses, cuando la salud del querido cantante de rancheras Vicente Fernández empeoró, comenzó a circular en las redes un vídeo en donde él comparte su «ultima voluntad».
En el clip, se aprecia a Vicente Fernández, junto a su hijo Alejandro Fernández, en un concierto masivo. Luego de cantar algunas estrofas con el reconocido «Potrillo», don Vicente dice algunas palabras bastante nostálgicas y relacionadas con el día de su partida.
«Esta canción para mí es muy especial. Creo que el día que me estén sepultando, la van a cantar a todo pulmón, en televisión o cualquiera donde estén», declaró el cantante.
La canción que Vicente Fernández quiere que le canten el día de su funeral es la de «Volver, Volver».
Falleció a sus 81 años
Tras haber sufrido un accidente en su habitación en su rancho Los Tres Potrillos, el cantante estuvo más de 3 meses internado en terapia intensiva en el hospital Country 2000 en Guadalajara, Jalisco.
Por todo ese tiempo, el charro luchó por su vida y con un altibajos en su salud demostró su valentía hasta el final de sus días.
Hoy 12 de diciembre en las primeras horas del día, los familiares del considerado icono de la musica ranchera mexicana, informaron su deceso.
Vicente es considerado uno de los máximos exponentes de la música regional mexicana a nivel mundial. Hizo unas 80 producciones discográficas y 25 películas.
En su carrera ha obtenido 3 Premios Grammy, 8 Grammy Latino y tiene una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
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La muerte de Chente es el final de una era
La muerte de Chente es el final de una era, la de los artistas puramente rancheros, un linaje que quizá comienza con Tito Guizar, encuentra su punto álgido con Jorge Negrete y llega a finales del siglo XX con Antonio Aguilar y con el propio Vicente Fernández, quien comenzó su carrera en caravanas artísticas que hacían giras extenuantes.
Vicente Fernández comenzó su carrera cuando de niño ganó un concurso amateur en 1954. «Lo importante no es comenzar tan pronto, sino aprovechar muy bien la oportunidad. Esta es una carrera muy hermosa para quien sabe respetarla», declaró a EL UNIVERSAL en una entrevista en 2006, en la cual también dijo que retirarse significaría ir directo a la tumba.
Diez años después, la vida lo obligaría a recapacitar. En medio de las complicadas dolencias por una serie de cirugías en las que le extirparon casi la mitad del hígado a causa de un tumor, en 2012, de una trombosis pulmonar, en 2013, y la operación de tres hernias, en 2015, Chente anunció que se despedía de los escenarios.
“Cuando yo digo me retiro, me retiro”, dijo ante la incredulidad del público, que siempre lo había escuchado decir en sus conciertos que mientras la gente aplaudiera, él seguía cantando.
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