ATLÁNTIDA, HONDURAS. Este miércoles fueron exhumados tres cadáveres encontrados en una fosa clandestina en un sector aledaño al río Bonito de La Ceiba. Según las autoridades, estaban en avanzado estado de descomposición, por lo que no pudieron identificarlos.
Sin embargo, existen indicios de que podría tratarse de tres jóvenes (incluyendo un menor de 15 años) reportados por sus familiares como desaparecidos desde el pasado jueves 19 de marzo de 2022.
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Se supone que se trata de Rubén Moisés Montiel Villeda (15), Jorge Gálvez Ruiz y Raúl Antonio Cálix, quienes, según la información, desaparecieron desde el jueves cuando andaban trabajando en el municipio de El Porvenir, Atlántida.
La Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida de La Ceiba y Medicina Forense de San Pedro Sula, realizaron esta exhumación para continuar con las investigaciones en conjunto con agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Los restos encontrados en la fosa clandestina, fueron trasladados hacia Medicina Forense de San Pedro Sula, para proceder a realizarles los exámenes de ADN y cotejarlo con los familiares de los jóvenes desaparecidos.
Un arrestado por el crimen
En un operativo capturaron a un hombre que responde al nombre de Johnny Mauricio Rodríguez Mencías, de 30 años de edad, alias Chicho, supuesto integrante de la Mara Salvatrucha (MS-13), desde hace cinco años. Él es sospechoso de participar en el rapto de los tres jóvenes.
Al arrestado le decomisaron un arma de fuego tipo pistola, calibre 9 milímetros, la cual contenía cinco proyectiles. Además, lo remitieron a los juzgados de La Ceiba, por suponerlo responsable de los delitos de porte ilegal de arma de fuego y asociación para delinquir.
Desaparición
De acuerdo con las investigaciones, los comerciantes estaban realizando venta de artículos electrodomésticos, cuando los interceptaron supuestos miembros de la MS-13. Los malhechores los despojaron de sus productos y los secuestraron en El Porvenir.
Por tres días, sus familiares los buscaron incansablemente. Se difundieron sus fotografías para buscar pistas de su paradero.
Relatos desgarradores
La madre de uno de los jóvenes, que respondía al nombre de Rubén Moisés Montiel Villeda, dio unas desgarradoras palabras a medios locales y aseguró que su hijo era un buen muchacho y andaba en su primer día de trabajo cuando le arrebataron la vida.
«No sé por qué yo le di permiso a mi hijo que fuera, si yo no lo dejaba ir. Yo no entiendo por qué tuvieron que hacer eso con él, si él no debe nada, es inocente. Ay Dios mío, si mi hijo pagaba por no hablar», dijo entre lágrimas la acongojada madre.
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