Redacción. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) reafirmaron ayer su cooperación de larga data a través de un nuevo acuerdo marco para fomentar una mayor colaboración a través de la armonización de los procesos operativos y de adquisiciones para una cooperación más eficiente y acelerar el desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe.
Esta alianza renovada permite a ambas instituciones aprovechar sus experiencias, brindando así una cooperación más ágil. Es decir, a nivel político y programático, a través de análisis y evaluaciones conjuntas, herramientas y metodologías alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
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Igualmente, por medio del conocimiento, apoyo a políticas e implementación de iniciativas, el PNUD y el BID ayudarán a los gobiernos a lograr mayor impacto y al mismo tiempo mejorarán sus instituciones y capacidades nacionales.
El acuerdo acelerará el progreso en áreas prioritarias conjuntas, como reducir la pobreza y la desigualdad, abordar el cambio climático e impulsar el crecimiento sostenible a través de la productividad y la innovación, amplificando el alcance y el impacto duradero de las acciones de desarrollo.
«Con este acuerdo, tenemos un marco nuevo y duradero entre ambas instituciones. Nos permitirá apoyar a nuestros países de una manera más ágil y eficiente», dijo el presidente del BID, Ilan Goldfajn.
Colaboración
Achim Steiner, administrador del PNUD, detalló que el BID y el PNUD llevan mucho tiempo de colaboración. Al mismo tiempo, de esfuerzos conjuntos en toda América Latina y el Caribe.
Existe «una visión compartida para reducir la pobreza y la desigualdad, abordar el cambio climático y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, con un enfoque en la equidad y la inclusión, la gobernanza efectiva y la protección social, innovación y digitalización”, expresó
De igual forma, precisó que este nuevo acuerdo sienta las bases de una colaboración sólida y más ágil. Enfrentará los diversos desafíos en la región, garantizando que nadie se quede atrás.
El BID y el PNUD han trabajado estrechamente durante un cuarto de siglo, cooperando en iniciativas de desarrollo social y económico. Además, destinadas, entre otros objetivos, a impulsar el crecimiento y el empleo, reducir la pobreza y la desigualdad. A su vez, fomentar una gestión racional de los recursos ambientales y naturales y promover la integración regional.
