Redacción. El Huracán Beryl se ha debilitado a categoría 2 y avanza hacia la península mexicana de Yucatán, a la que llegará como huracán la mañana del viernes con marejada ciclónica y vientos y olas destructivas, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de Estados Unidos (EEUU).
Pese a que el NHC no incluye por ahora a Estados Unidos en la ruta del huracán, meteorólogos de medios estadounidenses señalan que podría llegar a las costas de Texas, en la frontera con México, después de un nuevo fortalecimiento en las calientes aguas del Golfo de México.
El ojo de fenómeno meteorológico llegó la mañana de este jueves cerca de la isla Gran Caimán, después de causar muerte y destrozos en Jamaica el miércoles, y en las islas de Barlovento, a las que llegó con categoría 5, la mayor en las escalas Saffir-Simpson, a comienzos de la semana.
El primer huracán de la temporada atlántica mantiene vientos máximos sostenidos de 175 kilómetros por hora (110 millas por hora), según el más reciente boletín del NHC.
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El ciclón, que sigue su travesía por el Caribe, se encuentra a 215 kilómetros (155 millas) al oeste de Gran Caimán y a 445 kilómetros (275 millas) al este-sureste de Tulum (México).
Las alertas de huracán cobijan la costa de la península de Yucatán, incluyendo desde Chetumal, en la frontera con Belice, hasta Cabo Catoche, pasando por Cozumel y Cancún.
¿Peligro para Honduras?
De acuerdo con La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), «Beryl iniciaría su influencia sobre el territorio nacional desde el mediodía de hoy (miércoles 3 de julio), jueves y viernes, produciendo precipitaciones moderadas a fuertes con tormentas eléctricas«.
Los departamentos que se verán afectados por esas tormentas serán: El Paraíso, Choluteca, Valle, La Paz, Francisco Morazán, sur de Olancho, áreas de Lempira, Intibucá y Gracias a Dios. Sin embargo, no representa un alto riesgo para el país.
Finalmente, el ente gubernamental pidió a la población el monitoreo constante del fenómeno y tomar medidas de prevención, sobre todo deben tener cuidado los que habitan en zonas vulnerables a deslizamientos, derrumbes, deslaves, hundimientos, inundaciones, entre otras amenazas.