REDACCIÓN. Todos, sin excepción, deberíamos comer más apio. Esta hortaliza de sabor refrescante tiene tantos beneficios nutricionales que lo mejor sería que formara parte de nuestra dieta y es tan fácil de incluirlo en todos los platillos.
Podemos hacer ensaladas, caldos, jugos, cremas. Es sabroso y muy saciante. Asimismo, y como curiosidad, resulta interesante saber que en la antigüedad este vegetal solía utilizarse como ingrediente medicinal para tratar múltiples enfermedades.
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Queda claro que por sí mismo no podrá dar solución a las dolencias, pero puede favorecer el bienestar general. Es sencillamente, uno de los mejores alimentos para incluir en nuestros platos. A continuación te damos 9 razones por las que deberías comer más apio.
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El apio tiene muy pocas calorías y muchos nutrientes
Si deseas bajar de peso el apio debe formar parte de tu dieta. Es uno de los vegetales con menos calorías que podemos encontrar. Solo tiene unas 15 calorías por cada 100 gramos.
- Cuenta con un alto contenido en agua y en minerales como el calcio, el sodio o el magnesio.
- Entre sus múltiples vitaminas podrás encontrar la vitamina A , C, E, B6, B12 y la vitamina K. Entre ellas, la E destaca porque ha demostrado un gran poder antioxidante.
- Asimismo, tampoco podemos olvidar sus aceites esenciales, la fibra y sus fitonutrientes.
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Reduce la inflamación
Es posible que en la actualidad estés sufriendo dolor en las articulaciones. La artritis o simples sobrecargas musculares cursan con esas inflamaciones que tantas molestias nos ocasionan. El apio es uno de los mejores alimentos antiinflamatorios que puedes consumir.
Estas propiedades se dan gracias al poliacetileno. Este elemento nos ayuda a eliminar toxinas y a tratar procesos como la artritis reumática, la osteoartritis o artrosis, la gota, el asma y la bronquitis. De acuerdo con un estudio publicado en Phytotherapy Research, el consumo de apio puede ser positivo también para modular síndromes inflamatorios como el metabólico.
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Ayuda a calmarnos
Curioso, pero efectivo: entre los minerales más importantes que se esconden en la pulpa del apio está el magnesio. Este mineral, junto con sus aceites esenciales, nos permite relajar el sistema nervioso y conseguir un descanso más reparador. Después de un día estresante puedes tomar una buena sopa de apio para cenar.
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Gran alimento alcalino
El apio dispone de nutrientes alcalinizantes que se liberan al exprimirlo. Es importante tener en cuenta que durante la cocción perdemos muchas de sus propiedades. Así pues, para beneficiarnos al máximo del poder alcalinizante del apio vale la pena consumirlo de forma natural o en un jugo.
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Mejora la digestión
Una buena forma de facilitar nuestras digestiones y de combatir el estreñimiento es preparándonos un jugo de apio y col. Sus minerales, junto con sus múltiples ácidos y fitonutrientes, actúan como maravillosos tónicos digestivos capaces también de aliviar los gases intestinales.
También hay que tener en cuenta que presenta una significativa cantidad de fibra en su interior. Esta ha demostrado ser capaz de reducir la incidencia del estreñimiento, reduciendo las molestias intestinales.
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Una ayuda a tu vista
Una razón más por la que deberíamos comer más apio es por ser un alimento fabuloso para nuestra visión. La razón de que eso sea así se encuentra en esa vitamina mágica: la vitamina A. Basta con comernos una rama de apio al día para conseguir un 5 % de nuestra ración diaria de este nutriente.
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Ayuda a reducir el colesterol malo
El apio nos ayuda a reducir el colesterol «malo» o LDL. Si lo consigue es gracias a un componente muy especial, un tipo de fotoquímico llamado 3-N-butilftalida. Lo reconocerás fácilmente porque es lo que le confiere ese olor tan especial al apio.
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Disminuye la presión arterial
Si te han diagnosticado hipertensión y no sabes cómo equilibrarla, cuida de tu dieta. Si el apio actúa como un eficaz hipotensor se debe una vez más al mismo elemento que nos permite reducir el colesterol: el 3-N-butilftalida. Se recomienda consumir unos 2 tallos diarios de apio para notar buenos resultados.
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El apio es un buen anticancerígeno
Sabemos que, hasta el momento, no hay nada que pueda prevenir la aparición de un cáncer. Sin embargo, podemos minimizar el riesgo a través de una dieta más saludable. El apio contiene dos tipos de flavonoides muy especiales: la apigenina y la luteolina.
Estos dos antioxidantes, según un trabajo publicado en la revista Journal of Experimental and Clinical Cancer Research, resultan beneficiosos a la hora de luchar las células cancerígenas que afectan a los pulmones.
Incluye apio en la dieta
Tal y como podemos ver, comer más apio puede resultar increíblemente beneficioso. No obstante, no se trata de llevar una dieta estricta basada solo en unos pocos vegetales, frutas y fibra para poder bajar de peso o reducir el colesterol.
La clave está en alimentarnos con inteligencia, sin descuidar las proteínas, sin olvidar los hidratos de carbono o los ácidos grasos saludables como el presente en el aceite de oliva o los frutos secos.
Fuente: Mejor con Salud
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