REDACCIÓN. La falta de jueces en materia familiar es otro de los factores que hace que el proceso para convertirse en padres adoptivos en Honduras se sienta eterno, aseguran abogados que litigan, lo que complica también los procesos de adopción en Honduras.
Los impartidores de justicia no se dedican únicamente a esta práctica, debido a que en Honduras no existe un tribunal especial para este proceso.
Con audiencias programadas para cada cuatro meses, los requisitos para crear una familia mediante esta vía se sienten interminables, explican fuentes consultadas.
A esta deficiencia del sistema, se suma el hecho que a los abogados hondureños que participan en estos procesos, les solicitan un requisito especial.
Intermediarios extranjeros
«Yo llegué al DINAF para preguntar. Ellos muy amables me hicieron la siguiente observación: dentro del procedimiento debe haber instituciones en el extranjero, donde viven los adoptantes o adoptados extranjeros», detalló el abogado Carlos Alvarenga sobre su experiencia en los procesos de adopción en Honduras.
Asimismo, el jurista indicó que solicitan un registro. «Estas instituciones deben de estar acreditadas por el DINAF y por otra parte deben estar acreditadas en el lugar extranjero debidamente. No puede ser cualquiera», aseguró.
Del mismo modo, Alvarenga relató que esas instituciones son las encargadas de realizar los demás estudios que son requisitos en el proceso.
«Resulta que estas identidades también realizan los exámenes sociológicos, hacen la visita a la casa de los adoptantes«, manifestó.
El experto en leyes afirmó que los adoptantes son los que contratan los servicios legales. «Al parecer estas instituciones internacionales tuvieron malas experiencias, aunque el abogado es contratado por los interesados, se supone que así debe ser», indicó.
Inscripción en entidades
Alvarenga afirmó que al consultar en el DINAF sobre la representación en adopciones extranjeras se debe tener un contrato con esas instituciones en específico.
«Me dijeron: si usted quiere gestionar una adopción a nombre de extranjeros que viven en el extranjero, usted tiene que tener contrato con esas entidades», comentó.
Sin embargo, Alvarenga detalló que el DINAF aseguró que no se trata de una acción obligatoria. No obstante, le advirtieron que si no se inscriben con estas instituciones, no se puede acreditar como abogado de un proceso.
«Eso me da a mí la impresión que ha habido muchos abogados corruptos que no siguen el trámite y no hacen nada», expresó.
Alvarenga expresó que esa acción puede coartar el ejercicio del derecho de los juristas del país.
«También, eso pudiera ser un atentado a los abogados hondureños, que los limita a ejercer su carrera», afirmó.
Cobros excesivos por los trámites
De igual manera, el abogado hondureño compartió que algunos juristas del país cobran cantidades excesivas para llevar el trámite de adopción.
«Yo he escuchado a colegas que cobran 90 mil lempiras hasta 250 mil lempiras por llevar un trámite», señaló.
Asimismo, Alvarenga especificó que los elevados precios se deben a lo extenso que son los procesos judiciales.
«Es un trámite largo, hay que insistir mucho. Por lo tanto, eso hace prohibitivo a muchas familias que quieren adoptar, aquí hay mucho hondureño que quiere adoptar, pero no tiene esa plata», expresó.
Proceso debería ser gratis
Alvarenga indicó que se pueden crear instituciones que se dediquen a completar estos procesos de manera gratuita. «Eso también influye y debería de haber algunas instituciones que lo hagan de forma gratuita», afirmó.
El abogado señaló que las largas fases para poder convertirse en padres mediante esta vía hacen que las solicitantes desistan. «Lo que hacen es prohibirle a un niño que sea adoptado«, expresó a Diario Tiempo.
«Cuando al niño no lo conocen, el proceso de acercamiento para que el niño se vaya acostumbrando, esa es la parte más larga. Esa no se puede acortar, el niño debe de irse adaptando a su nueva familia», señaló.
Falta de personal, otro problema
Otros de los factores que alarga el proceso para que hondureños se puedan convertir en padres es la falta de jueces en el área de familia.
«Eso es una de las cosas horribles que hace que el proceso se alargue. Por ejemplo, en el caso de los juzgados de familia, solo hay ocho jueces de familia», señaló.
Del mismo modo, Alvarenga señaló que los togados se encargan de solventar otros problemas de esta rama del derecho. «Pasan atestados con casos de cuota de alimentos. En segundo lugar, están los divorcios, pleitos de guardia y cuidado, pleitos de patria potestad».
El abogado hondureño aseguró que las audiencias para la adopción de un niño están siendo programadas cada cuatro meses, alargando más el proceso.
«Crear un juzgado especial para cuestiones de adopciones. Eso sería una propuesta, porque hay términos que no se pueden acortar y hay procesos que no se pueden obviar», indicó.
De igual manera, Alvarenga propuso que entidades como el Consultorio Jurídico de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) se encarguen del proceso.
